ANDOAIN

Blanco intervino en la inauguración de la casa del pueblo de Andoain, junto al secretario general del PSE, Patxi López, el máximo dirigente de ese partido en Gipuzkoa, Miguel Buen, y el alcalde de la localidad, José Antonio Pérez Gabarain.

Patxi López aseguró que «los socialistas no nos rendiremos ni claudicaremos ante la violencia y el terrorismo», y añadió que pretenden «lograr la paz y la libertad desde la defensa de los principios democráticos y del Estado de Derecho», ya que «no hay más hoja de ruta para alcanzar la paz que el Estado de Derecho». Replicó a Otegi que «los únicos que ponen obstáculos al proceso de paz son los que roban pistolas o los que amparan la ‘kale borroka’», por lo que emplazó a «menos lanzar órdagos y menos trasladar culpas a los demócratas». A este respecto, indicó a los dirigentes de la izquierda abertzale que, si quieren un proceso con bases democráticas, «son ellos los que tienen que allanar el camino y asumir los principios democráticos, que son radicalmente incompatibles con la violencia».

Desde el PNV, fue el portavoz del EBB, Iñigo Urkullu, quien expresó su «temor» a que ETA esté actuando «miméticamente» como en el periodo de Lizarra, en caso de que llegue a confirmarse su autoría en el robo de armas en Nimes y que la dirección de la organización lo haya «avalado». Además, mostró su preocupación por «la improvisación» del Gobierno español y dijo que el diálogo para crear la mesa de partidos debe continuar «pese a todo».

La presidenta de EA, Begoña Errazti, cree que es un «error de bulto» que el proceso de paz y normalización política pueda estar «sujeto a vaivenes» como el robo de armas. Abogó por no «caer en aspectos muy puntuales» como los «robos curiosos de armas, que se podían cuestionar» la víspera del debate en el Parlamento Europeo, pues «distorsionan» el objetivo de lograr la desaparición de la violencia y «la restitución de derechos al pueblo vasco».

El líder de EB, Javier Madrazo, abogó por «dar pasos» y avanzar hacia un acuerdo entre los partidos vascos sobre el derecho a decidir para imposibilitar que ETA «dé marcha atrás» y pueda volver a las armas: «La mejor respuesta que pueden ofrecer las fuerzas políticas e instituciones ante la crisis del proceso de paz es renovar esfuerzos para sacarlo adelante».

Por su parte, el lehendakari Ibarretxe aseguró que no hay que tener «miedo al fracaso en el proceso» y que, si alguien piensa en «volver atrás», lo pagará «socialmente con la reprobación de todos los vascos». Realizó esas declaraciones en la charla que ofreció en Córdoba (Argentina) a la diáspora vasca, donde anunció la puesta en marcha de una página web (www.konpondu.net) para canalizar la participación social en el proceso de paz y, en concreto, de la diáspora vasca, a la que animó a implicarse porque son una «garantía» para que el proceso «sea irreversible».