Instan a París a implicarse desde la sala de vistas
El juicio contra los catorce ciudadanos vascos que se está celebrando en el juzgado Cour d’Assises fue escenario de un emplazamiento claro hacia el Gobierno francés. «No desaprovechéis la actual situación», fue el mensaje leído por Esparza mientras que Oiartzabal animaba a respetar el derecho de autodeterminación.
PARIS
Los presos vascos Iñaki Esparza y Asier Oiartzabal hicieron ayer un llamamiento al Gobierno francés para que «no desaproveche la oportunidad que se presenta» y exigieron que ponga fin «a su estrategia deliberada de agravamiento de la situación». Esparza le hizo saber que «cerrar la puerta a una salida política supone el riesgo de prolongar y extender el conflicto de Euskal Herria» y alertó de que «mientras el Estado francés no reconozca la realidad de este conflicto y los derechos fundamentales del pueblo vasco, el conflicto perdurará».Esparza acusó al Gobierno galo de poner en práctica «la táctica del avestruz» y le invitó a «respetar la decisión del pueblo vasco». El juzgado Cour d’Assises fue el escenario de este mensaje. Allí se celebró la primera vista del juicio contra catorce militantes vascos. Asier Oiartzabal, Lola Lopez, Didier Agerre, Iñaki Esparza, Juan Angel Otxoantesana, Alberto Ilundain, Lorentxa Guimon, Zigor Garro y Ibon Gogeaskoetxea (juzgados en rebeldía) y cinco miembros de la familia Erbina Fidel, Xabier, Miren, Amaia, y Kontxi Zubillaga son los ciudadanos vascos que serán juzgados en esta vista oral. La conclusión de este juicio se prevé para el 30 de noviembre. Oihane Errazkin, fallecida en julio del 2004 en la cárcel de Fleury-Mérogis, hubiera si juzgada en este juicio y es por ello que sus compañeros quisieron recordarla. Todos ellos llevaban una camiseta con el retrato de la joven donostiarra.
Desalojo de la sala
Los padres de Oihane Errazkin, con numerosos familiares y amigos más, fueron expulsados de sala al comienzo de la vista. En un principio el tribunal no concedió la palabra a Esparza, lo que motivó protestas tanto de los encausados como del público, que comenzaron a cantar el ‘‘Eusko Gudariak’’. El presidente ordenó entonces el desalojo de la sala, viviéndose momentos de tensión.Oiartzabal siguió a Esparza y habló ante el tribunal en nombre de Oihane Errazkin. «Ella les habría dicho que no pierdan el tiempo con estrategias represivas. Por ahí no esta la solución», resaltó. Indicó que la única salida al conflicto que vive Euskal Herria pasa «por su derecho legítimo a la autodeterminación» y finalizó con un claro mensaje: «Podrán condenarnos, pero no juzgarnos».
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