El lehendakari oficializa la convocatoria del sábado «por la paz y el diálogo»
El lehendakari oficializó ayer la convocatoria del Gobierno de Lakua de una manifestación el próximo sábado con el lema «por la paz y el diálogo». Fuentes de Ajuria Enea señalaron que antes de comparecer ante los medios de comunicación Ibarretxe ya conocía la existencia de un comunicado de ETA y por ello insistió en la necesidad de que la organización armada muestre su voluntad de abandonar definitivamente la violencia para que haya «otra oportunidad».
GASTEIZ
El lehendakari, Juan José Ibarretxe (PNV), el consejero de Justicia, Joseba Azkarraga (EA), y el consejero de Vivienda, Javier Madrazo (EB), comparecieron ayer ante los medios para convocar de manera oficial la manifestación del próximo sábado, a las cinco de la tarde, en Bilbo, «por la paz y el diálogo», y hacer una valoración del momento político tras el atentado del pasado 30 de diciembre en Barajas. Según fuentes de Lehendakaritza, antes de la rueda de prensa los miembros del Gobierno de Lakua conocían la existencia de un comunicado de ETA.El lehendakari, que fue el único que tomó la palabra, además de lamentar la pérdida de dos vidas humanas en la explosión, señaló que «ETA había hecho un flaco favor al pueblo vasco». A continuación, afirmó que con el atentado «no sólo rompió el alto el fuego sino también la confianza» sobre las bases que habían dado lugar al inicio del proceso. Por ello, consideró que el llamamiento hecho por Batasuna el lunes «tiene su mérito y tiene su importancia», pero lo consideró «insuficiente». Apuntó que para que haya «otra oportunidad», «ETA debe mostrar su voluntad de poner fin definitivamente a la violencia, haya o no acuerdos políticos», o Batasuna debe pedírselo. El lehendakari destacó que no basta con volver a la situación del 22 de marzo, porque ello supondría que el alto el fuego se podría volver a romper «sin aviso previo».
Buscar otro camino
Ante lo que Lakua considera la constatación de que «ETA rompió el alto el fuego con la bomba» y que también el Gobierno español lo ha dado días después por roto, Juan José Ibarretxe se preguntó «qué debemos hacer. ¿Caer en el desánimo? ¿Admitir la vuelta atrás?». El lehendakari se respondió diciendo que su Ejecutivo pretende ser un «agente activo» para «buscar la paz y trabajar por la normalización política».En este sentido, Ibarretxe criticó la tendencia que se tiene a «ser pendulares». Aseguró que «contra la violencia hay que luchar con el estado de derecho», pero aclaró que «estado de derecho no es aplicar una política de derechos humanos a lo Bush». Señaló que «tampoco el Pacto Antiterrorista y su derivada la Ley de Partidos, que son instrumentos del pasado, sirven para el futuro ni sirven contra la violencia». En su opinión, hay que buscar otro camino. Por ello, pidió una reflexión serena sobre cómo abordar los nuevos tiempos. Finalmente, Lakua hizo un llamamiento a la participación social, convocando a la manifestación del próximo sábado a cuantos quieran expresar su deseo de paz, de que acabe la violencia de ETA, y también de «diálogo entre los partidos, separado de la violencia, para decidir nuestro futuro». Preguntado sobre la posibilidad de que Batasuna se sumara a la marcha Joseba Permach afirmó en la mañana de ayer que todavía no había una decisión al respecto Ibarretxe respondió que ésta era una convocatoria realizada especialmente a los ciudadanos, pero que en relación a Batasuna o cualquier partido, debía decir que «si de manera honesta quieren participar en una manifestación para exigirles todos a ETA el fin definitivo de la violencia y reclamar a los partidos políticos que hablemos para resolver las cosas, bienvenidos sean. Si por contra eso no se dice y se falsea la intención con la que se quiere estar es mejor que se quede en casa». Junto a ello, el lehendakari trasmitió su «agradecimiento sincero a PSE, a ERC y a CiU» por sumarse a la convocatoria. En el día de ayer se conocieron también las adhesiones de Aralar, CCOO y Udalbide. UGT y ELAse pronunciarán hoy. LAB señaló que abordará la cuestión el viernes, en el marco de una asamblea general prevista con anterioridad.
Ofrenda floral, misa y debates
Junto a la manifestación del sábado, el Gobierno de Lakua ha convocado para el domingo, a las 12.30, una ofrenda floral y una misa posterior también en Bilbo, para trasladar al a colectividad ecuatoriana «el abrazo del pueblo vasco». Además, se organizarán debates pueblo a pueblo, en internet y en diversas asociaciones sobre la búsqueda de la paz y la normalización. -
Ajustándose al lema
Iñaki IRIONDO
Una de las cuestiones que despierta interés informativo con respecto a esta manifestación es si a la misma podrían sumarse organizaciones de la izquierda abertzale. Portavoces de Batasuna y de Askatasuna no han cerrado esa puerta, aunque han aclarado que todavía no han tomado ninguna decisión. Haciendo memoria se puede recordar que Euskal Herritarrok, Gestoras pro-Amnistía y Senideak ya se sumaron a las concentraciones que organizó el propio Juan José Ibarretxe para el 3 de diciembre de 1999, fecha en la que finalizaba la tregua declarada por ETA el 16 de setiembre de 1998. A buen seguro la militancia de la izquierda abertzale tiene muy pocos problemas con el lema de la convocatoria realizada por el lehendakari: «Por la paz y el diálogo». Más reticencias puede tener a mezclarse en la misma marcha con quienes durante nueve meses se han jactado de haber hecho menos que el PP en el 98, aunque también en el PSE habrá dirigentes que apuesten sinceramente por la búsqueda de soluciones. Estos recelos podrían superarse desde la convicción de que una movilización multitudinaria de amplio espectro fuera útil para lograr poner en marcha un proceso basado en la no violencia de todas las partes y en el diálogo político con capacidad de decisión; si una gran manifestación fuera un mensaje contundente que se visualizara también desde Madrid de que la sociedad vasca proclama que las recetas del pasado no sirven para el futuro. Y en este contexto, no se entendería que si la izquierda abertzale decidiera finalmente sumarse a la marcha por compartir el ansia de paz y diálogo, el lehendakari pusiera pegas, mientras ayer mostró su «agradecimiento más sincero» a un PSE que dice no compartir «ni la forma de la convocatoria ni el lema de la pancarta», que la considera «una nueva equivocación de Ibarretxe» y que afirma explícitamente que lo del diálogo no va con ellos. Si la izquierda abertzale quiere participar debería tener la misma libertad que el PSE. ¿O no? -
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