Los valores cristianos, eje del ideario de los ultras del PE
El grupo de ultraderecha recién constituido en el Parlamento Europeo bajo el nombre Identidad, Tradición, Soberanía (ITS) defenderá en la Eurocámara «los valores cristianos, la familia tradicional y la herencia y cultura de la civilización europea», según el ideario presentado ayer por su presidente, el eurodiputado del FN francés Bruno Gollnisch.
BRUSELAS
Siete eurodiputados del Frente Nacional francés, con su presidente, Jean-Marie Le Pen, y su hija Marina, cinco representantes de Gran Rumania, tres parlamentarios del partido flamenco Vlaams Belang, Andreas Mölzer, apartado durante un tiempo de la formación de extrema derecha austriaca FPO por sus posiciones «demasiado a la derecha»; dos italianos, incluida la nieta del dictador fascista Benito Mussolini, Alesandra Mussolini; el británico Ashely Mote y el búlgaro Dimitar Stoyanov se han unido para constituir Identidad, Tradición, Soberanía (ITS), grupo parlamentario que iniciará su andadura oficial en la sesión plenaria que el Parlamento europeo celebrará el lunes. Estará presidido por el dirigente del FN Bruno Gollnisch, procesado por cuestionar el Holocausto judío.
No es la primera vez que la extrema derecha constituye grupo parlamentario en la Eurocámara, ya que Le Pen presidió el Grupo de las Derechas Europeas, entre 1984 y 1989, y el Grupo Técnico de las Derechas Europeas, entre 1984 y 1999, pero sus cargos electos «se sentaban como independientes debido a sus diferencias», según precisa PascalDelwitt, politólogo de la Universi- dad Libre de Bruselas, que afirma que «ahora, han superado sus divergencias en interés del orden material».
La creación del grupo les aportará ventajas como la posibilidad de participar en la conferencia de presidentes, un mayor tiempo de uso de la palabra en los plenos, o más facilidades para impulsar iniciativas políticas. En el terreno económico, a partir de ahora percibirán un 30% más de lo que recibían como no inscritos, es decir, cerca de un millón de euros al año.
Gollnisch, que compareció ante la prensa acompañado de otros cuatro miembros del grupo, rechazó las acusaciones lanzadas desde algunos medios de comunicación tildándoles de hooligans o de pertenecer a la más pura tradición totalitaria. «Nos situamos en la herencia de los valores de la civilización europea porque a veces se nos olvida que fue la primera, incluso antes que otras brillantes civilizaciones, en inventar la libertad y la igualdad», aseguró el presidente de ITS.
Al ser preguntado sobre cómo podía defenderse de estas críticas cuando algunos miembros del grupo están acusados de manifestaciones antisemitas respondió: «El hecho de que estemos acusados no significa que seamos culpables».
Sobre su postura ante la entrada de Turquía en la Unión Europea, Gollnisch avanzó que mientras permanezca «el problema de Chipre» la adhesión no será posible.
«Están en el límite del racismo»
El politólogo de la Universidad Libre de Bruselas Pascal Delwitt aseguró que las formaciones a las que pertenecen los integrantes de ITS son «partidos xenófobos que se encuentran en el límite del racismo para evitar las condenas». El eurodiputado alemán Vural Öger, por su parte, consideró que «un partido de extrema derecha con ideas antieuropeas no tiene lugar en el ParlamentoEuropeo». Llamó a trabajar, ya que «si no tenemos cuidado, los extremos van a subir cada vez más en los próximos años». -
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