PARIS
El Festival del Cómic de Angulema, en el oeste del Estado francés, abrió ayer sus puertas con un programa ambicioso que pretende recuperar los visitantes que el año pasado no acudieron a causa del temporal de nieve que dificultó los desplazamientos. Los organizadores pretenden volver a tener 200.000 visitantes, después de que en la pasada edición se perdieran 50.000.
El cambio en la dirección, con la sustitución de Jean-Marc Thévenet por Franck Bondoux, ha marcado también un nuevo rumbo con el objetivo de reconquistar el terreno perdido.
El festival, que se cerrará este domingo, incluirá desde las obras de más éxito hasta las novedades y tendencias del sector. Una de las principales novedades es que Angulema reservará un espacio para el manga o cómic japonés, que el festival girondino contribuyó a dar a conocer en Europa pero que hasta ahora no había tenido su propio lugar.
La expansión editorial que presenta el sector del cómic en el Estado francés, con más de 4.000 títulos publicados el año pasado, no se verá reflejada en una mayor presencia de editoriales en el festival.
Angulema será escenario del lanzamiento de una muestra mundial de cómic, acontecimiento que se extenderá durante los próximos cuatro años y cuyo resultado final podrá apreciarse en la Exposición Universal de Shanghai (China) en 2010.
El dibujante Trondheim, que presidirá el jurado, ha propuesto ideas como «conciertos de dibujos» o los «partidos de improvisación».
Autores consagrados como Hergé de cuyo nacimiento se cumple un siglo, Kid Paddle o Jim Woodring serán objeto de exposiciones durante el festival.