DONOSTIA
El mahaikide Pernando Barrena, uno de los imputados por la reunión con Ibarretxe, destacó ayer que la izquierda abertzale mantiene un nivel de interlocución «importante» con el resto de agentes, y subrayó el objetivo de «crear nuevas bases» para avanzar. Así las cosas, negó rotundamente el argumento de que «el proceso está roto» que intentan visualizar agentes como el Gobierno español y el PSOE.
Barrena fue entrevistado en Radio Euskadi, donde al ser preguntado sobre si el proceso está finiquitado respondió que «en absoluto» y matizó además que hacía esa afirmación «atendiendo a la dinámica política actual».
Añadió que en los contactos que se producen «no se está empezando de cero» ya que en los últimos años «se ha hecho un trabajo político importantísimo» que «el 30 de diciembre no tira por la borda».
El mahaikide navarro no concretó el alcance del «nivel de interlocución importante» del que habló, pero sí señaló que «no hay puertas que tengamos que dar por cerradas». Preguntado por si hablan con el PSOE, dijo que «no es algo que tengamos que responder» y recordó que hablan «con todos los que quieren».
Búsqueda de viabilidad
El objetivo de estas comunicaciones sería buscar un acuerdo que dé «viabilidad» al proceso a partir de unas «nuevas bases».
Pernando Barrena fue preguntado en la entrevista sobre si efecivamente existe una reflexión en la izquierda abertzale sobre el atentado de Barajas y el alcance del alto el fuego de ETA. Respondió que «es evidente que hay sectores más allá de la izquierda abertzale que están comprometidos con hacer viable el proceso de resolución que no han entendido los términos en los que ETA reafirmó su apuesta por el alto el fuego del 22 de marzo y en lo que se refiere al derecho de respuesta». E indicó que lo tendrán en cuenta «a la hora de posicionarse en el futuro y tomar postura por posiciones efectivas que puedan hacer que este proceso funcione». Yendo más allá, Barrena aseguró que si el proceso avanzara, la izquierda abertzale estaría dispuesta a tomar «decisiones valientes» como las adoptadas por el Sinn Fein durante estos años y el pasado domingo.
La proximidad electoral fue también objeto de valoración en esta entrevista. Al respecto, Pernando Barrena recordó que quienes argumentan que el atentado del 30 de diciembre aleja a la izquierda abertzale de estar en las elecciones «están implícitamente aceptando una posición a favor de una legislación de excepción que anula derechos civiles y políticos».
Se mostró convencido de que la izquierda abertzale estará en los comicios ya que, a su entender, «nadie puede permitirse perpetuar ese engendro que es la Ley de Partidos».
Incidió en que los miembros de la izquierda abertzale «son ciudadanos que no tienen anulado ningún tipo de derecho ni civil ni político», por lo que «tenemos que contemplar como única hipótesis válida la capacidad que tenemos para organizarnos y estar presentes en una cita electoral», añadió Barrena.