Un hombre de 32 años ha sido condenado a un año de prisión por el Juzgado de lo Penal número 2 de Iruñea acusado de un delito de maltrato habitual contra su abuela, que le crió desde niño, a quien la sentencia le prohíbe acercarse.

La resolución del juzgado iruindarra relata que abuela y nieto vivían juntos en el mismo domicilio, por lo que la mujer se encargaba del cuidado y atención del joven desde los 12 años, aunque desde hacía varios años el joven «le insultaba, le amenazaba y le despreciaba de forma constante».

Los términos en los que está redactada la sentencia son contundentes y ofrecen una cruda visión de la situación familiar: «Le exige cantidades de dinero constantemente, le amenaza si no lo obtiene y rompe objetos de la vivienda si la anciana se niega».

El fallo subraya que la situación había llegado «hasta tal punto de tensión» que la mujer se había visto abocada incluso a abandonar la vivienda en la que hasta la fecha convivía con su nieto.

Debido a la actitud del acusado, su abuela padece «nerviosismo, angustia, falta de apetito, miedo y problemas para dormir», aunque la resolución judicial matiza que, durante los hechos acontecidos, el encausado, «tenía afectadas las facultades intelectuales y volitivas» debido al «consumo prolongado durante varios años de diversas sustancias tóxicas».