El matadero Erralde de Durango asegura que cumple con todos los preceptos sanitarios y de seguridad alimentaria. Como explica su presidente, Mikel Ansotegi, un técnico del Ejecutivo de Lakua controla todos los días el sacrificio del ganado.

El problema fundamental parte de que esta instalación es antigua y la distribución del área de sacrificio no está construida en línea recta, como impone la Unión Europea, pero Ansotegi asegura a GARA que el consejo de administración del único matadero existente en Bizkaia está decidido a establecer las medidas correctoras hasta que concluyan las obras del nuevo matadero de Berriz.

Sin embargo, el Departamento de Sanidad del Gobierno autonómico mantiene que el incumplimiento de la normativa técnica europea obliga a su cierre mañana, lo que dejaría en el paro a diecinueve personas y repercutiría negativamente en otro número importante de empleos indirectos. Carniceros, agricultores y ganaderos, junto a formaciones políticas, reclaman una moratoria «para que esa decisión no provoque un nuevo desastre en el sector agroganadero de Bizkaia, como ocurrió en 2005 cuando cerró el matadero de Durango», que fue recuperado por la actuación del sector, a través de EHNE Bizkaia, con el apoyo de quince ayuntamientos que se hicieron cargo de la gestión del mismo.

Entonces existía un macromatadero en Zorrotza (Bilbo) que, al final, cerró por sus enormes pérdidas económicas, mientras que la instalación de Erralde se mantiene.

¿Cuál es el precedente que ha llevado al Gobierno de Lakua a la decisión de cerrar Erralde?

Parece ser que viene precedida por una inspección que llevó adelante la Unión Europea en 2009. Parece que dentro del Estado español hubo irregularidades en varios mataderos, sobre todo en la zona de Valencia. Con miedo a la resolución de Bruselas, llega esta notificación de cierre de nuestra instalación. Tenemos una notificación de un inicio del procedimiento del cierre. Esperamos la resolución para poder defendernos. Está en manos de nuestros abogados.

¿En Bruselas les indicaron que no pondrían impedimento a algunas soluciones transitorias?

Así fue. Cuando nos comunicaron esa situación en el Gobierno vasco, fuimos y nos dijeron que el cierre se debía a razones de salud pública. Se excusaban en un legislación europea en la manera de proceder al sacrificio de animales. Hay que tener en cuenta que, después, estuvimos en Bruselas para conversar con los técnicos sanitarios.

Les explicamos cómo el matadero de Erralde era una instalación pequeña a nivel europeo. Sacrificamos unas 10.000 cabezas al año. El 80% del ganado que matamos procede de Bizkaia y el 95% de la carne que producimos se consume en Bizkaia. Entendieron de que era posible mantenerlo con la aplicación de algunas medidas correctoras.

¿Se lo dijeron al Departamento de Sanidad de Lakua?

Sí. A la vuelta de Bruselas comunicamos al Gobierno vasco la reunión y les recordamos que estábamos dispuestos a las medidas correctoras. Hay que dejar claro que en Erralde, hoy por hoy, cumplimos la normativa sanitaria y de seguridad alimentaria. Hay un técnico sanitario del Gobierno vasco todos los días en el matadero que comprueba el rigor sanitario que aplicamos en Erralde. No ha habido problema, por lo que no entendemos esa resolución.

¿A qué se refiere?

Entendemos que el Gobierno vasco se tenga que preocupar por la salud pública y que tenga que tomar medidas, pero creemos que esta medida es desproporcionada y drástica, que pone al sector agroganadero en una situación grave. Además, entendemos que hay medidas correctoras para que el sacrificio se dé en mejores condiciones de una forma transitoria hasta que se termine la instalación del nuevo matadero en Berriz.

Si no ha habido problemas sanitarios, ¿por qué se adopta esta medida si en dos años estará listo el nuevo matadero?

No sabría responderte. Lo mejor sería preguntar a los responsables del Gobierno vasco. El matadero de Durango es bastante viejo. Tiene una línea de sacrificio que no se utiliza en la UE, pero hay que entender que estamos 15 ayuntamientos de Bizkaia soportando toda la carga, haciendo un esfuerzo importante y que está ahí el proyecto del nuevo matadero.

Las tierras son ya propiedad de los quince ayuntamientos integrados en Erralde. Tenemos el compromiso del Departamento de Agricultura del Gobierno de Gasteiz de sufragar el 40% del coste de la nueva instalación y, además, el compromiso de otros municipios vizcainos que se han ofrecido a entrar en el nuevo proyecto Erralde.

Con todo esto, no entendemos muy bien por qué se nos intenta impedir nuestra actividad en las instalaciones de Durango. Porque con unas medidas mínimas, y algunas mejoras en el matadero, entendemos que no hay ningún problema para alargar su vida. Ahora no tenemos ningún problema, además con las medidas correctoras se ofrecerá el servicio con más seguridad y sanidad. No es comprensible esa decisión que parece irreversible.

¿Si se cierra el matadero de Durango se puede resentir el proyecto de Berriz?

Una de las mayores preocupaciones que tenemos es esa, no es por los clientes, porque al fin y al cabo somos ayuntamientos y estamos para ofrecer un servicio. Pero hay que tener en cuenta que si se cierra el matadero de Durango los que van a perder son los diecinueve trabajadores directos y otros indirectos del transporte animales, de carne...

Máxime en este momento de crisis económica y de incremento del paro. Aparte de eso, el que va a perder de forma seria será el sector cárnico de Bizkaia, porque esta provincia se va a quedar sin matadero y van a tener que moverse a otro de alrededor. Eso supondrá más gasto en portes y en pérdida de tiempo, lo que hace inviable la explotación ganadera. Si pierdes competitividad de esta manera, no te compensará. Más tiempo, más costes y menos beneficios, puede que no te merezca la pena seguir trabajando. El miedo viene de que el sector puede perder ganaderos, como ya pasó en 2005.

¿Se refiere al cierre de la instalación que llevaba la mancomunidad de Durango?

Sí. El cierre produjo la pérdida de muchos ganaderos, que perdieron cabezas de ganado con el cierre del matadero de la Mancomunidad de Durango. Entonces había otro matadero en Bizkaia, en Zorrotza. Pero lo que está claro es que si se cierra este, el golpe puede ser bastante mayor para el sector, no será como en 2005 porque ya no hay más mataderos cerca.

¿La Diputación de Bizkaia les ayuda para mantener el servicio y las instalaciones abiertas?

En principio, la excusa con la que estamos tropezando frente a la Administración foral es que no es competencia suya. Quienes llevamos el matadero Erralde creemos que no puede servir eso de excusa, porque estamos hablando de que somos el único matadero de Bizkaia y que lo estamos sosteniendo entre quince municipios. En este territorio somos más de un millón de personas y, si la decisión del Gobierno vasco no se pospone, nos quedaremos sin matadero. En Gipuzkoa, sin embargo, tienen cuatro mataderos con bastante menos población.

Es por ello que desde Erralde consideramos que la Diputación de Bizkaia no tiene que desentenderse de esta situación. Deberían de apoyarnos con fuerza, pero tenemos que decir con pesar que no se están involucrando mucho en apoyo al único matadero de Bizkaia.

Hace poco vimos que la Diputación, que preside José Luis Bilbao, entregó parcelas del banco de tierra para darle fuerza al sector primario. Nos pareció bien. Pero hay que tener en cuenta que las tierras son el primer eslabón de esta cadena, porque el último es el matadero, porque si no hay sacrificio de animales la cadena no tiene sentido alguno. Hay que iniciar y finalizar la cadena, todos los elementos son necesarios.

¿Tiene que haber más ayuntamientos en el proyecto de Erralde para garantizarlo en un futuro próximo?

Sí. Ya tenemos compromisos de otros ayuntamientos para este futuro inmediato. Pero es importante para todos que Erralde siga abierto y creemos necesario que cada vez sean más los municipios que apoyen, junto a la participación de la Diputación. Si creemos en el trabajo de los agricultores de Bizkaia tendremos que responder a sus necesidades con responsabilidad.

No podemos estar diciendo que estamos a favor del sector primario una y otra vez y que es estratégico y luego apoyar políticas que solo favorecen a las grandes superficies y a las macroexplotaciones cárnicas. Si desaparece Erralde es lo que ocurrirá en Bizkaia, sin lugar a dudas.