Los grupos municipales de Bildu y PSE realizaron ayer el balance de los primeros seis meses de gestión del equipo de gobierno de Azkuna en el Ayuntamiento de Bilbo; ambas formaciones criticaron el «poder absoluto» del PNV en la villa.

La concejala de Bildu Aitziber Ibaibarriaga definió el período transcurrido como «poder absoluto» y subrayó la actitud de «desprecio» del PNV hacia la oposición, para recordar posteriormente las situaciones vividas estos meses en Kukutza, donde el interés particular se impuso al social; o en Basurto donde prohibieron la apertura de la mezquita de Pablo Alzola, evitando que quien tiene credos diferentes pudiera disfrutar de los mismos derechos.

Por otro lado, acusó al equipo de gobierno del consistorio bilbaíno, de «estar cerca de los empresarios y las grandes cadenas comerciales que, en su afán de multiplicar beneficios a cualquier precio, no dudan en recortar los ya bastante disminuidos derechos de los y las trabajadoras».

Además, la edil denunció que «en estos seis meses se ha podido comprobar el modelo de ciudad que plantea el PNV, un modelo de derechas, autoritario, cerrado a la participación ciudadana, y en el que el interés particular de unos pocos, prima sobre el beneficio general». Finalmente, tras oponerse a este modelo, la coalición aseguró que en los próximos meses, seguirá tejiendo alianzas y trabajando codo con codo con todos aquellos sectores sociales, sindicales, políticos, y vecinales, que apuesten por un Bilbo diferente, construido a escala humana».

« Una ciudad distinta»

En la misma linea, el portavoz del PSE, Alfonso Gil, criticó que el PNV en el Ayuntamiento de Bilbo está «instalado cómodamente en una soledad de mayoría absoluta» añadiendo que los socialistas apelan a que eso «se rompa» porque consideran que «no es bueno para nada, no solo para la ciudad de Bilbo sino para todo el resto de grupos políticos de la Villa».

Además emplazó a los jeltzales a aceptar sus propuestas «si bien es cierto que el PNV no necesita de los votos del resto de los grupos de la oposición, es importante y le pedimos que acepte nuestras reflexiones", recordando que todas las apuestas del PSE son «de carácter constructivo».

Finalmente señaló que su grupo tiene «un análisis de la ciudad muy distinto al que tiene el PNV» así, pidieron al Gobierno municipal que «se enriquezca con las proposiciones que este grupo le hace desde su análisis propio de ciudad distinta a la que tiene el PNV para Bilbo