30 partidos, 72 goles, 122 tarjetas, 3 expulsiones, 4 penaltis y 1.377.726 espectadores después, esta noche en el Olímpico de Kiev España e Italia se juegan el trono del fútbol europeo de los próximos cuatro años. Una final en la que se enfrentan la selección que mejor fútbol ha desplegado en los últimos años con la que mejor fútbol ha mostrado en esta Euro. España ante Italia. Gane quien gane hoy, seguro que el fútbol saldrá ganando.

Cada ocho años, en la Eurocopa, la final la disputan los dos equipos que abrieron la competición en su mismo grupo. Ha vuelto a ocurrir. En su primer encuentro sellaron un más que igualado empate a un gol, con medio tiempo para cada equipo. Desde aquel día, los italianos han ido a más hasta alcanzar su mejor expresión en semifinales, mientras que España ha ganado casi por el peso de sus últimos títulos. Pero Italia no es de las que el historial del rival la arrincona, y más a esta Italia de Cesare Prandelli que quiere ser protagonista. Decía Arrigo Sacchi que en Italia siempre se ha pensado que el Calcio es un deporte individual en el que el entrenador solo estudia cómo frenar al rival. Esta Italia no.

«Conociendo a los italianos lo más normal es que hubieran sabido contemporizar, perder tiempo, buscar un partido que a nosotros no nos convenía nada, y sin embargo fue todo lo contrario», reconocía ayer el técnico español Vicente Del Bosque.

El entrenador salmantino asumió que Italia generó el «momento de más angustia» a sus pupilos durante el torneo continental, en el que ambos equipos han llevado «vidas muy paralelas» hasta encontrarse de nuevo en una final que se antoja «una incógnita, como es el propio fútbol». Incógnita como la de cuál será su hombre más avanzado esta noche en Kiev. Todo apunta a que Cesc retornará al once inicial, habrá que ver hasta dónde aguanta un cansado David Silva, y si el recambio de inicio puede ser Jesús Navas o Pedro. Los españoles llegan muy justitos en la competición y se la juegan, precisamente, ante un combinado transalpino que es el que más campo ha recorrido de todas las selecciones en este torneo, 608 kilómetros.

El favoritismo, la presión de convertirse en el rival a batir, representa un papel nuevo para España. Los rivales han cambiado su identidad. Todos menos Portugal, tan valiente que rozó el premio. El seleccionador del éxito, Vicente Del Bosque, lo ha tenido claro desde el principio. No ha dudado. Diez titulares indiscutibles y la figura del nueve rotatoria en función del rival.

Dos defensas inquebrantables

La ambición de una España que busca su tercera Eurocopa chocará con el `estilo Prandelli', que busca un título para coronar el cambio. Es la nueva Italia. La tetracampeona alejada del conservadurismo clásico, que quiere coronar su estilo con su segundo título europeo, que acredite un cambio en la escuadra azzurra. Desde que el técnico italiano llegó al cargo decidió dar un giro a las costumbres arraigadas del fútbol de su país. Apostó por un equipo con amor por la pelota y gusto por salir al ataque sin descuidar la defensa que tantos éxitos dio a Italia en el pasado.

Ahora mismo La Nazionale vive de la batuta de un enorme Andrea Pirlo -que viene de liderar a la Juventus en el Calcio-, todo el mundo admira el trabajo silencioso y efectivo de Daniele De Rossi, o el peligro arriba que constituye la pareja Cassano-Balotelli, jugadores más que conocidos y que podrían ser los nombres de esta Euro.

Pero, lo mismo que España, Italia está fundamentando su trayectoria hasta la final en su legionaria defensa. Chiellini, Barzagli, Bonucci, Abate y Balzaretti, defensores que barren las delanteras rivales, que taponan de manera efectiva cada espacio en el área y, sobre todo, que han llegado a este torneo en un estado de gracia notable. Como alguien enfatizaba ayer, «sin los cierres de Barzagli y Bonucci, las anticipaciones de Balzaretti y Abate, o las intercepciones de Chiellini, la Azzurra no estaría en la final». Si a ello añadimos a Buffon en el arco, un tipo con el que te irías a la guerra...

Enfrente, cómo no, está también una zaga española -solo ha concedido un tiro a puerta en los últimos dos partidos- con seguramente una de las mejores duplas del mundo, como son Sergio Ramos y Piqué, un descomunal Jordi Alba, la barredora y apagafuegos Busquets y el parapenaltis Casillas. Duelo de defensas contra delanteras, y en la medular un `OK Corral': Xavi y Pirlo. Oliver y Benji, dos magos del balón. Auténticos metrónomos y equilibristas de la posesión. Hace cuatro años Torres fue el protagonista, esta Euro busca el suyo. Y quien lo encuentre será campeón.