Euskadi tiene una larga tradición en materia de meteorología y climatología, no necesariamente ligada a servicios operativos o a proyectos de I+D+i en estas áreas, pero sí enraizada en su sociedad, por muchas razones, entre otras por su orografía y también por la especificidad de su sociedad. A cualquiera se le ocurren ejemplos que relacionan nuestro pasado y nuestro presente con la meteorología y con el clima, en definitiva con la tierra, el mar y el aire, y es que en Euskadi estamos muy ligados a nuestro entorno natural, nadie lo duda, y en eso también se incluyen la meteorología y la climatología, y no hay duda de que estos ejemplos serán cada vez más numerosos en el futuro.

En lo que respecta a servicios operativos vascos, en el año 2003, el 16 de diciembre, Euskalmet, la Agencia Vasca de Meteorología, abrió sus puertas a la operatividad y a la sociedad. Entonces la apuesta del Gobierno Vasco fue clara, de- sarrollar un servicio que realizara labores de vigilancia y predicción meteorológica para el País Vasco, y así disponer de información fiable y de calidad para la toma de decisiones, por ejemplo, ante fenómenos de meteorología adversa. Además, se persigue también el acercamiento de esta información a toda la sociedad vasca. Desde entonces hasta ahora han pasado ya tres años y Euskalmet sigue esforzándose en cumplir con ese objetivo fundamental. No es fácil, no hay demasiados referentes, y es que no hay que olvidar que sólo existen tres agencias similares a nivel estatal, Euskalmet es una de ellas, y el número de este tipo de agencias de este nivel no llega a diez en el mundo.

Euskalmet era y cada día es más necesario. Hay muchas personas y colectivos que necesitan una predicción meteorológica fiable y de calidad, por ejemplo para realizar su trabajo. Agricultores, arrantzales, industrias de generación de energía, transportistas, agencias de seguros, albañiles que trabajan en tejadosŠ son muchos los colectivos y todavía más en el caso de Euskadi, ya que el futuro de las sociedades avanzadas requiere servicios cada vez más especializados y muchos de ellos tienen una cierta dependencia de las condiciones meteorológicas. Pero es que, en todo caso, toda la sociedad vasca necesita saber si lloverá o no, o si nevará o no, o si hará mucho calor o no, como mínimo para decidir qué ropa es más adecuada, lo cual también redunda en nuestra salud y en nuestra economía, o para programar actividades deportivas, festivas, culturales... o para saber si es recomendable salir de viaje o no, y para eso hoy en día hace falta una herramienta de calidad y fiable, y por tanto que se base en las más avanzadas tecnologías y en el rigor científico.

Perder la confianza de las personas sería muy fácil si Euskalmet tuviera un ratio de fallos de un 25% en la predicción diaria, y para no llegar a ese nivel se necesita establecer y trabajar de acuerdo a normas. En eso Euskalmet se esfuerza todos los días, 24 horas al día, los 365 días del año, porque Euskalmet no descansa ni siquiera los días más entrañables de la navidad. En el Parque Tecnológico de Miñano, en las oficinas de Euskalmet, hay siempre como mínimo dos personas que pueden avisar en cualquier momento de fenómenos de meteorología adversa. Es evidente que la mayor parte del tiempo las personas que trabajan en Euskalmet nos aportan todo esto y mucho más, porque elaborar predicciones o informes climatológicos o planes que buscan aportar información específica para diferentes sectores como el agroforestal, es tan importante como llevarlos a cabo, y eso lo tratamos de hacer usando mucha ciencia y mucha tecnología, y con mucho respeto hacia la tradición.

En lo que respecta a la capacidad de predecir lo que llamamos muy a menudo «el tiempo» hay que decir que desde antes que ningún servicio meteorológico existiera ya se realizaban predicciones, que a veces se llamaban meteorológicas. Las ha habido para los próximos días, e incluso a medio y largo plazo. La cuestión es que hoy en día la comunidad científica ha demostrado sobradamente que hay métodos rigurosos y contrastados que deben ser la base de la predicción meteorológica del futuro. Por eso la Dirección de Meteorología y Climatología apuesta por estas herramientas y también por la I+D+i, por eso en el año 2007 el Plan Vasco de Ciencia y Tecnología dispondrá de una sectorial en el apartado de investigación estratégica dirigida a los ámbitos de la meteorología y la climatología, que en los próximos tres años aportará 2.400.000 euros para este apartado, eso es parte del futuro.

Euskalmet mira hacia el futuro, tiene muy presente lo que ha sido nuestro pasado, trabaja el día a día, pero reflexiona sobre lo que debe ser el servicio en el futuro. Creo que estos extremos están muy claros, hay que saber entender que muchos años atrás no había ordenadores, ni modelos numéricos, ni siquiera meteorólogos, es decir, no existía lo que hoy en día es fundamental para poder aportar información de calidad y fiable, y eso hay que respetarlo. Asimismo, antes tampoco había estaciones meteorológicas, ni radares per- filadores, ni radares doppler, ni boyas oceanometeorológicas, ni estaciones de sondeo, ni satélites meteorológicos, ni supercomputadores, ni medios de comunicación que hoy difunden los pronósticos meteorológicos, ni muchas otras herramientas y recursos con los que hoy en día afortunadamente algunas agencias cuentan, como Euskalmet. Esto hace posible que un grupo de personas que han recibido una formación científica larga y que cuentan con muchos años de experiencia puedan llegar a realizar predicciones meteorológicas a 3, 5 y 7 días con mucha fiabilidad y que a veces hasta se atrevan a aventurar la predicción a más largo plazo, con muchos matices. Esta es la apuesta del Departamento de Transportes y Obras Públicas del Gobierno Vasco, una apuesta de futuro, ya que no estar preparados para el futuro nos condenaría a vivir en o del pasado, y Euskalmet en tres años ha demostrado sobradamente que quiere y sabe mirar hacia delante, esa es nuestra visión. -