Israel dice haber abortado un ataque suicida
·El titular de Defensa afirma que Teherán entregó dinero a la Jihad para atentar en plena campaña
TEL AVIV
La captura de un presunto kamikaze, detenido entre Jerusalén y Tel Aviv con un explosivo, habría evitado un atentado en plena campaña electoral israelí, donde cualquier suceso sangriento parece favorecer a la derecha sionista como ya ocurrió en los comicios de 1996.El supuesto kamikaze fue interceptado en una camioneta cuando se dirigía desde Jerusalén a Tel Aviv con un explosivo y metralla dentro de un bolso. El comisario Ilan Franco reveló que el explosivo pesaba entre 5 y 6 kilos y «no era un cinturón sino un bolso-bomba». Gracias a una información que supuestamente consiguieron los servicios de inteligencia, la Policía habían declarado el estado de máxima alerta en Tel Aviv y Jerusalén. Un helicóptero y decenas de patrullas persiguieron al vehículo sospechoso durante más de treinta kilómetros, hasta interceptarlo en un cruce a mitad de camino entre las dos ciudades. Diez palestinos fueron arrestados, entre ellos el supuesto kamikaze, identificado como un «militante de la Jihad Islámica de unos 20 años y natural de Al-Yamun, cerca de Jenin. Las otras nueve personas, entre ellas el conductor de la camioneta, estaban siendo interrogadas anoche.
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