DEPORTIVO 2

REAL SOCIEDAD 0

DONOSTIA

Fue un partido en la línea de los dos jugados fuera de casa en San Mamés y el Bernabéu, con un trabajo serio en defensa sin conceder apenas ocasiones a sus rivales, pero pobre en ataque, donde sólo se salvaron un par de acciones de Fabio Felicio y Mikel Alonso. Y no se puede inquietar tan poco porque al final el equipo local empuja aunque sólo sea por inercia y la Real no tiene seguridad defensiva como para aguantar un resultado como quiso hacer ayer Bakero al dar entrada a Juanito como segundo pivote en los últimos minutos. Resulta que la Real defiende el 0-0 con cuatro defensas y dos pivotes y nadie ayuda a Garrido en una acción individual dentro del área.

Bakero responsabilizó de esa jugada al lateral irundarra porque estaba cansado después de una semana en la que había tenido un problema que le ha debilitado. ¿Ypor qué no alineó entonces a Aitor en el lateral izquierdo si estaba mejor?

Pero, tanto que habla Bakero de equipo y de solidez, al final la clave está en las ayudas y en una acción defensiva dentro del área alguien tiene que hacer una ayuda al lateral por dentro. Si la Real juega con dos pivotes, uno debe cubrir esa zona del área. No puede meterse Rivas hacia dentro en el área pequeña en lugar de salir a ayudar a su lateral. Claro que Rivas tiene que saber coordinarse con Juanito, que ayer jugó antes que Garitano a pesar de que no se ha entrenado en Zubieta en esa posición nunca. Tampoco de lateral, donde Riki, que hizo un segundo tiempo sensacional, se aprovechó de las circunstancias para sentenciar un partido del que no se pueden sacar tantas conclusiones como hizo ayer Bakero.

Sí se puede compartir que la forma de jugar de la Real hasta el minuto 78 es el camino que debe seguir en materia defensiva. Pero cuando el técnico sustituyó a Fabio Felicio por Juanito para compensar quizás la mayor altura de Taborda descarriló por completo. Porque con esa decisión se vuelve a lo que no ha funcionado y a la improvisación, con Xabi Prieto en la izquierda, Novo en la derecha, Mikel Alonso de media punta... Y Xabi Prieto no está con su lateral en la jugada del gol...

Pocos argumentos ofensivos

Ese no es el camino que va a llevar a la Real a ser sólida y competitiva, porque si no juegan los mejores y no se ataca mejor es casi imposible obtener resultados positivos. Porque se inquieta tan poco que los rivales buscan la victoria y un lateral juega de extremo y gana un partido como el de ayer en el que ninguno de los dos equipos hizo grandes méritos para imponerse hasta el minuto 80 porque en ataque apenas hubo actividad. Pero si alguien hizo más para lograr el triunfo fue el Deportivo, que al margen de los dos goles, lanzó cinco corners por uno de la Real y tuvo varias acciones de más peligro, sobre todo dos provocadas por Riki por la derecha en el inicio del segundo tiempo, que las dos más claras de la Real: El centro de Mikel Alonso que remató sin peligro Kovacevic y un mal disparo del tolosarra desde un lateral. Y si el rival tiene más ocasiones lo normal es perder, como en los últimos cuatro partidos.

Porque Bakero dijo ayer que el de ayer es el buen camino, pero también ha valorado positivamente cuatro de los cinco partidos que su equipo ha jugado hasta ahora y el equipo nunca ha atacado bien y es el más goleado de Primera. Y si el equipo juega tan bien, ¿por qué se hacen tantos cambios cada domingo? Uno cree que la Real tiene jugadores suficientes para mantenerse sin problemas, pero o su entrenador, además de elegir la forma de jugar idónea como ayer, acierta ya con los once mejores cada domingo y trabaja mejor el juego colectivo, o espera otro año muy duro porque es complicado jugar cuando se está tan abajo.