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Gara > Idatzia > Euskal Herria 2006-10-31
Zapatero se jacta de no haber dado más paso que ir al Congreso a marcar sus reglas
·tras siete meses de alto el fuego presenta como merito haberse movido menos que aznar en el 98

Siete meses después de que ETA declarara el alto el fuego permanente, el presidente del Gobierno español se jacta de que no ha dado todavía ningún otro paso que el de haber ido al Congreso para explicar a la opinión pública «los principios del proceso de paz y dar luz verde a un posible diálogo con ETA» que todavía no se ha materializado. Zapatero contrapone esta actitud con la de anteriores gobiernos del PP que, según manifestó ayer, con treguas de nueve días o indefinidas acercaron a decenas de presos. Por otra parte, muestra un «prudente optimismo» sobre el desarrollo del proceso.

GASTEIZ

Con motivo del cierre de la campaña electoral en Catalunya, la Cadena Ser tenía concertada para ayer una entrevista matinal con el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero. Pero la primera mitad del encuentro estuvo dedicada al proceso de paz y normalización democrática en Euskal Herria.

Las preguntas iniciales aludieron al robo de pistolas en Nimes y la cuarta a si el Gobierno español se ha sentado alguna vez a hablar directamente con ETA hasta el día de hoy. Rodríguez Zapatero respondió que «cuando se produzca el diálogo que tenga una expectativa de contenido, el Gobierno lo que hará en primer lugar es informar a los grupos políticos», como se comprometió en su día.

Y al hilo de eso, el presidente del Gobierno introdujo uno de los mensajes que era evidente que quería dejar marcados en la entrevista de ayer. «Fíjese ­ llamó la atención del entrevistador y de la audiencia­, se dicen muchas cosas estos días, [pero] desde el alto del fuego permanente de ETA el Gobierno sólo ha dado un paso, sólo uno, que es ir al Parlamento y compartir con los grupos políticos y la opinión pública, con los ciudadanos, los principios del proceso de paz y dar luz verde a un posible diálogo con ETA. En otras circunstancias, de treguas de nueve días o de treguas indefinidas, gobiernos anteriores, y en concreto el Gobierno del PP, dio bastantes pasos. En una tregua de nueve días de 1996 acercó 36 presos, en la tregua del 98 acercó 133. Yo sólo he dado un paso, explicárselo a los ciudadanos y compartir con los grupos políticos lo que puede ser un proceso de diálogo para el fin de la violencia».

La misma idea fue repetida en la última pregunta sobre la materia, antes de adentrarse en otras cuestiones como las elecciones en Catalunya.

Consecuencias

En la entrevista de ayer, José Luis Rodríguez Zapatero detalló algunas de las «consecuencias» que anunció que tendría el robo de pistolas si se confirmaba que fue obra de ETA, lo que el presidente considera «bastante probable», aunque no probado. Explicó que «la primera de ellas es una muy evidente: responderán por lo que han hecho. La segunda, que el Gobierno va a ser exigente al máximo con el máximo rigor para acreditar la voluntad de la banda ETA de poner fin de la violencia». Además, señaló que si la acción pretendía ser «una especie de pulso», «se equivocan radicalmente».

En todo caso, el presidente del Gobierno español invitó a tener perspectiva, ya que un problema de 40 años no se va a resolver en poco tiempo. Y añadió que ahora existe una «oportunidad real» que es su deber aprovechar, apuntando más adelante que «es un proceso que va a costar trabajo, esfuerzo, firmeza y flexibilidad al mismo tiempo».

Reglas cambiantes

Zapatero hizo referencia en varias ocasiones a las reglas básicas del proceso y en dos de estas ocasiones las enunció.

La primera en la pregunta inicial, en la que habló de cuatro principios: «ausencia de violencia, legalidad, voluntad democrática y acuerdo de convi- vencia en Euskadi». Dos respuestas después, de los cuatro principios desapareció uno: el de «la voluntad democrática».

A Batasuna

También habló de reglas al referirse a Batasuna. Le preguntó el entrevistador si «será bueno para España que Batasuna, o la marca que sea, esté en las próximas elecciones municipales si no da algún paso que todavía no ha dado». Y el presidente respondió que «es bueno para la democracia, que es lo mismo que decir que es bueno para España, que Batasuna acepte las reglas de juego. Y será bueno que desde la aceptación de esas reglas de juego logremos avanzar en un acuerdo de convivencia en Euskadi, de la pluralidad de lo que representa Euskadi, de las distintas sensibilidades que Euskadi tiene, que implique a las fuerzas políticas, a las fuerzas sociales, etc. Eso sería positivo».

Por ello, Rodríguez Zapatero animó «a la llamada izquierda abertzale a que acepten las reglas de juego, que entenderán que sólo desde la democracia, sólo desde la palabra, sólo desde la libertad, se pueden defender las ideas. Todas las ideas. Esa es la grandeza de un marco de convivencia plural».

Añadió que «tanto el Gobierno como el PSOE tienen la máxima voluntad, la máxima voluntad, de que representen un espacio que tienen, sin duda alguna, en la sociedad vasca, y que ese espacio pueda contribuir a lo que desea la inmensa mayoría de los vascos, la paz y poder disfrutar de un gran país que es Euskadi».

«Sabemos dónde estamos»

El presidente del Gobierno español ­que volvió a tender su mano al PP­ negó que esté improvisando. Para ello recordó que cuando dijo que el principio del fin de la violencia estaba cerca fue muy criticado y al poco se declaró el alto el fuego. Aprovechó para enfatizar que «sabíamos lo que decíamos y hoy sabemos lo que sucede, sabemos lo que queremos y sabemos cómo hacerlo».

Zapatero concluyó asegurando que «cada paso que dé en el proceso de paz será un paso seguro» y señalando que mantiene un «prudente optimismo».



Piden 10 ó 15 días para confirmar la autoría del robo
El director general de la Policía y de la Guardia Civil, Joan Mesquida, afirmó ayer en París que las policías española y francesa necesitan «de 10 a 15 días» para confirmar si ETA fue la autora del robo de pistolas en Nimes. Mesquida mantuvo su reunión semestral con el director de la Policía Nacional francesa, Michel Gaudin. Tras el encuentro se informó de que desde enero se han hallado en el Estado francés 43 vehículos que se suponen robados y usados por ETA. -



Rajoy exige al Ejecutivo español que rectifique su «temeraria» política

MADRID

Poco después de la entrevista radiofónica a Zapatero, el líder del PP, Mariano Rajoy, compareció en la sede central de su partido para dar lectura a una declaración institucional en la que exigía al presidente español que compareciera de manera «inmediata» en el Congreso español para rectificar su «temeraria» política respecto a EuskalHerria.

«No cabe que el presidente del Gobierno continúe dando pasos hacia el abismo, con la mirada perdida hacia otro lado, como si estuviese prisionero de un proceso que sólo él ha generado pero que ya no controla», suscribió Rajoy.

El presidente del principal partido de la oposición ofreció al Ejecutivo todo su «apoyo» para «perseguir a ETA», y consideró que Rodríguez Zapatero «debe anunciar que cesa la negociación secreta que mantiene con Batasuna-ETA para hablar del precio político. Debe dejar claro ante los españoles que no va a ceder aún más en el debilitamiento de nuestras policías y jueces».

«Es la hora de dar cuentas y rectificar. Y de hacerlo públicamente, sin más engaños ni ocultaciones. Es tiempo de dejar de perder el respeto a las instituciones y de abandonar la condescendencia con los criminales», sentenció.

La respuesta del PSOE no se hizo esperar. Su portavoz en el Congreso, Diego López Garrido, aseguró que Zapatero no comparecerá. «El señor Rajoy lo único que quiere es utilizar cualquier plataforma para acosar al Gobierno, para presionar a la Justicia y para boicotear e impedir un proceso de paz al que se ha opuesto desde siempre», manifestó.

López Garrido indicó que el Ejecutivo español se ajustará al «procedimiento» anunciado con anterioridad y respaldado por todos los grupos parlamentarios salvo el Partido Popular, mediante el cual el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, informará «cumplidamente» al resto de formaciones políticas «de forma discreta y prudente».



Acordar y concretar reglas
Iñaki IRIONDO

José Luis Rodríguez Zapatero hizo ayer constantes apelaciones a las reglas o principios que han de regir el proceso de paz y a «las reglas del juego» que debe asumir la izquierda abertzale. El presidente español juega con la magia de las palabras. «Los principios» del proceso a los que se refería son, en realidad, los principios que dice asumir el Gobierno. Es decir, son principios de parte. Unos principios. Para ser los principios habrían de estar acordados y ser más concretos, mejor definidos. Un principio ­y menos el referido a la voluntad democrática­ no se le puede perder a un presidente de una respuesta a otra.

En cuanto a «las reglas de juego» para la izquierda abertzale, conviene recordar que Batasuna cumplía con «las reglas de juego» hasta que las cambiaron a mitad de partido con la expresa intención de expulsarla del terreno de juego. Es decir, son una reglas trampeadas y lo que ahora corresponde, por tanto, es «destrampearlas».

Zapatero asegura «saber lo que sucede, lo que quiere y cómo hacerlo». De ser así, sabrá también que no puede hacerlo solo. Que debe contar con la ciudadanía vasca y que su Gobierno y su partido, cada cual en su ámbito, deben alcanzar acuerdos, entre otros, con la izquierda abertzale. Y eso no se consigue jugando con las palabras. -


 
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