GaraAzkenak - Paperezkoa - English Edition  |  Le Journal
EUS | ES | FR | ENG
 » PAPEREZKOA
  -Aurkibidea
  - EuskalHerria
- Jendartea
- Ekonomia
- Iritzia
- Mundua
- Kultura
- Kirolak
 » AZKENORDUA
 » ENGLISH EDITION
 » DOSIERRAK
 » DOKUMENTUAK
 » IRUDITAN
 » HEMEROTEKA
 » Produktuak
Gara > Idatzia > Iritzia > Gaurkoa 2006-11-22
David Barbero - Miembro de la Asociación de Autores de Teatro
Sobre la situación del teatro en Bilbao

Creo que el intercambio de cartas entre el actor, director y autor teatral Ramón Barea con el concejal de cultura de Bilbao Jon Sánchez y el posicionamiento posterior de los profesionales de la escena bilbaina son, en lo fundamental, una muestra de la inquietud y preocupación existente entre los profesionales de las artes escénicas por la situación del teatro en Bilbao.

Este debate abierto es una oportunidad para llevar a cabo un análisis público sobre tal situación, en el que, tanto a título personal como en calidad de miembro de junta directiva de la Asociación de Autores de Teatro, deseo participar con el fin de unir una voz más que pueda contribuir a un diagnóstico mejor y a una más adecuada solución.

Dentro del balance general sobre la situación de las artes escénicas en Bilbao, por empezar por algo positivo, hay que reconocer, a mi juicio, que debe darse una buena valoración en el apartado de exhibición de los espectáculos que se producen en el Estado español. Se debe estar de acuerdo, salvo preferencias particulares, en que entre lo que se programa en el Teatro Arriaga, en el Palacio Euskalduna y en los diferentes teatros municipales de las poblaciones cercanas a la capital, ­sin olvidar la labor de la sala La Fundición­, del teatro que se produce fuera llega casi todo lo que tiene interés y no con mucho retraso.

Sin embargo, el desequilibrio entre la importación y la exportación de productos escénicos, entre el teatro que se trae y el que se produce aquí es absolutamente desproporcionado. Eso impide que se pueda considerar a Bilbao no ya un referente en las artes escénicas, sino tampoco una ciudad con una actividad escénica normalizada, equilibrada y estable.

Sin duda, son muchas las causas por las que se ha llegado a un panorama tan desolador en lo referente a la producción de espectáculos escénicos en Bilbao. Pero entre esas causas debe situarse el escaso apoyo de la administración local en este aspecto concreto de la producción. Pensar que ese hueco está cubierto con el centro de Bilbaoeszena es poco serio. Asegurar que el Teatro municipal Arriaga ya cumple con esa misión al haber puesto en escena dos obras de Shakespeare dirigidas por Lluis Pasqual y protagonizadas en los principales papeles por nombres muy conocidos de fuera no se puede tomar como una justificación suficiente. Apelar al reparto de competencias entre ayuntamientos, diputaciones y Gobierno difícilmente se puede interpretar como algo distinto de tirar balones fuera.

El apoyo a la producción, para superar este desajuste, debe dirigirse tanto a las compañías, grupos y profesionales individuales que se puedan dedicar, en Bilbao, a desarrollar un teatro más experimental como a los que opten por un campo más general o más popular o incluso más comercial. En ninguno de esos campos Bilbao puede ser sólo receptor y consumidor.

En este apartado del apoyo a la producción, como representante de la AAT y a título personal, debo hacer una denuncia de la desatención concreta en que estamos los autores de textos, aunque tampoco sea el momento de sacar nuestras discriminaciones individuales.

Asimismo, hay en Bilbao una carencia clara de un local de exhibición para productos escénicos propios, que no necesariamente han de ser estelares o programarse con el único criterio de lograr la ocupación total de los locales teatrales o batir récords de espectadores. Debe tratarse de un local intermedio, cuya ausencia no es cubierta ni por la sala Bilborock ni por el local abierto para ensayos en el Merced. En cuanto a la programación de espectáculos de vanguardia, la labor que realizan los propietarios de la Sala La Fundición, con gran esfuerzo personal y graves dificultades, es más digna de ser pública que privada.

La carencia de un centro oficial y superior de enseñanza de las artes escénicas es tan notoria que nadie podrá negarla. El ayuntamiento de Bilbao podrá alegar que no es competencia suya establecer esos estudios, pero difícilmente podrá decir que ha realizado todos los esfuerzos para que sean una realidad.

En definitiva, creo que las autoridades locales de Bilbao deben reconocer que su apuesta por las artes escénicas, aunque esté expresada en palabras muy sonoras, no es ni profunda ni de continuidad. No se lucha porque Bilbao, o Bizkaia en general, tenga una vida escénica propia no ya brillante, sino mínimamente normalizada y equilibrada. Parece que se busca más tener unos pocos acontecimientos deslumbrantes que aparezcan destacados en los medios de comunicación y agasajar a grandes figuras mediáticas que llegan de fuera, que potenciar una estructura teatral propia, potente y seria nacida aquí desde la base.

Finalmente me gustaría decir que los profesionales de las artes escénicas también debemos reconocer que nosotros tenemos una parte en la responsabilidad sobre la situación existente y éste es un tema grave a tratar también entre nosotros con seriedad, detenimiento y autocrítica. -


 
Inprimatu
...Albiste gehiago
Kultura
Bertsolarien lana, liburu batean eta bi diskotan bildua
Euskal Herria
Condenan a 13 de los 18 primeros jóvenes juzgados por las «detenciones preventivas»
Ekonomia
El IRPF recortará el ingreso público en 236,7 millones
Mundua
La muerte del ministro antisirio Gemayel agrava la situación política libanesa
Kultura
«Rock&Klik», hogei urteotako euskal musikaren historia Urberen begietatik
Mundua
Obrador se proclama presidente de México ante un Zócalo abarrotado
  CopyrightGara | Kontaktua | Norgara | Publizitatea |  rss