PARIS
Los diputados de la Asamblea Nacional comenzaron a debatir el proyecto de ley del ministro de Interior, Nicolas Sarkozy, sobre «delincuencia».Aprobado en primera lectura por el Senado el 21 de setiembre, el texto original proponía en recrudecimiento sin reserva alguna de las sanciones contra los menores «delincuentes» y contra los reincidentes y hacer pivotar sobre los ayuntamientos la represión contra aquéllos.
Algunos de los puntos más draconianos han sido retirados por la oposición del primer ministro, Dominique de Villepin, y del ministro de Justicia, Pascal Clement, recelosos de que un rechazo del Consejo Constitucional francés les estalle en plena pugna por las presidenciales con el PS de Ségolène Royal.
También la ministra de Defensa, Michèlle Alliot-Marie, arremetió recientemente contra Sarkozy, al que acusó de haber provocado que la derecha en el poder «ha dado a entender la perniciosa idea de que un joven es un delincuente en potencia o en el futuro».
Pese a su «peinado», el texto es duramente criticado por el Colectivo Nacional Unitario de Resistencia a la Delación, formado por sindicatos de izquierda de magistrados y personal de enseñanza.
«El Estado penal se refuerza al mismo ritmo que el Estado social se diluye y ya ha señalado a los chivos expia- torios: mendigos, sin techo, prostitutas, inmigrantes, gitanos, jóvenes y familias sin recursos», denuncian.
El PS aprovechará el debate para poner en tela de juicio «el conjunto de la política de seguridad del Gobierno».
