COLOMBO
Al menos quince personas murieron ayer y otras 40 resultaron heridas en un atentado suicida en un autobús de pasajeros en el sur de Sri Lanka, menos de un día después de otro atentado en un autobús que dejó cinco muertos y 50 heridos.
El Ejército ceilandés atribuyó ambos atentados a la guerrilla de los Tigres de Liberación de la Tierra Tamil (LTTE).
el LTTE rechazó estar implicado en ninguno de los dos incidentes. «Lo negamos tajantemente. No somos responsables de eso, es todo lo que puedo decir», explicó el portavoz militar del LTTE, Rasiah Ilanthirayan, por teléfono a AP.
Los dos atentados, perpetrados en menos de 24 horas, se producen en medio de una dura ofensiva del Ejército contra la tierra tamil, enclavada en el norte y este de la isla, controlada por la guerrilla.
En la última semana al menos una veintena de personas han muerto a causa de la ofensiva ceilandesa, entre ellas quince civiles muertos cuando un bombardeo del Ejército destruyó un poblado de pescadores en el distrito de Mannar.
A raíz de aquel suceso, la ONU instó al Gobierno de Colombo y a la guerrilla a asumir sus responsabilidades bajo la ley internacional y tomar medidas para proteger a los civiles.
El ataque de ayer tuvo lugar en la localidad de Seenigama, a 88 kilómetros al sur de Colombo, cuando una supuesta guerrillera tamil hizo estallar en el autobús la carga explosiva que llevaba, según las primeras investigaciones, difundidas por el portavoz militar, Prasad Samarasinghe. «Hemos encontrado un cuerpo femenino en el interior del autobús y por los daños producidos por la explosión, especialmente importantes alrededor suyo, sospechamos que podría tratarse de una kamikaze», aseguró.
El LTTE ha utilizado habitualmente en sus treinta años de lucha armada la táctica de los ataques suicidas para responder a la represión militar por parte de Sri Lanka.
Los tamiles exigen desde los setenta la independencia. Sri Lanka ha respondido con la guerra, que ha dejado más de 65.000 muertos.
