Bilbao Basket sucumbe ante los triples de Pamesa
·El regreso de Javi Salgado y la lesión de Montáñez, cara y cruz del choque de ayer
PAMESA VALENCIA 79
BILBAO
BASKET 67
BILBO
Bilbao Basket, definitivamente, baja muchos enteros cuanto más se aleja de Bilbo. Si, además, dejan de defender, baja todavía más. Si, como corolario, su rival les da de su propia medicina tiradora, entonces poco les queda por hacer.Eso fue lo que, básicamente, le sucedió al conjunto bilbaino en La Fonteta frente a un Pamesa Valencia que se jugaba su presencia en la Copa y estuvo más que atinado desde más allá de los 6,25 metros. Además, tal vez por un sentido colectivo del éxito, no fue el acierto de unos o dos jugadores, sino que casi todos los jugadores de Katzikaris acertaron desde más allá del arco. La circulación de balón de los locales y la mala defensa de los de Vidorreta facilitaron el bombardeo azulejero. Al final, 79-67 para los locales.
Regresa Salgado
Una de las pocas buenas noticias del partido de ayer fue el regreso a las canchas de Javi Salgado, de baja desde finales del diciembre pasado por culpa de una apendicitis. El base de Santutxu puso toda su buena voluntad y aportó cierto criterio al ataque bilbaino Azofra no tuvo ayer su mejor día aunque sufrió en defensa porque todavía no está en su mejor momento físico.En lo que al partido respecta, el mismo no fue la octava maravilla del mundo. Tal vez por el horario matutino o por la escasa afluencia de público en La Fonteta cualquiera diría que los valencianos se jugaban entrar o no en la Copa el encuentro de ayer fue muy soso. Fue en la primera mitad donde se fraguó el festival de triples de Pamesa. Los valencianos anotaron 11 de sus 17 intentos triples. Sin embargo, sólo anotaron cuatro lanzamientos de dos, por lo que se llegó al descanso con un 41-29. Lo peor no era la ventaja, sino la sensación de que la victoria iba a ser local, sí o sí. El guión de la segunda mitad no varió para nada. Bilbao Basket, de la mano de un enrachado Luc Recker, se acercó a ocho puntos, 46-38, en los mejores instantes de los bilbainos. Pamesa se obsesionaba con tirar de tres y se atisbaba una opción para la remontada. Un par de triples de Douglas, 25 puntos, y una interminable sesión de malos ataques enseñaron que todo era un espejismo. El último período fue un continuo dejar pasar el tiempo. La tensión de los locales iba bajando paulatinamente y así pudo maquillar el resultado Bilbao Basket. En esos últimos minutos, al menos defendió con un poco de intensidad y recuperó algún balón, pero nada más. Al final, en un partido muy tristón, Bilbao Basket sufrió la lesión de Román Montáñez, que se torció el tobillo.
«Me preocupa que no hayamos competido»
A.G.
BILBO El partido de ayer dejaba pocas dudas sobre la necesidad de cierta crítica de Txus Vidorreta hacia la escasa labor de sus jugadores. Y, pese a mostrarse ecuánime, así se mostró el entrenador de Indautxu tras el partido. «Me preocupa mucho que no hayamos sabido competir», inició su soliloquio el bilbaino. «Es cierto que varios jugadores han estado enfermos durante la semana y la guinda al pastel ha sido la lesión de Román Montáñez, pero hoy ‹por ayer‹ no hemos competido y eso me preocupa». Viendo que el conjunto bilbaino hace ya tiempo que se ha estancado en las seis victorias, se le preguntó si pudieran cundir los nervios en su plantilla, a lo que el técnico vizcaino respondió relativizando la situación. «Aún no hemos obtenido la séptima victoria, pero no es algo que ahora me preocupe demasiado. Nos queda toda la segunda vuelta por jugar, donde nos tocará jugar más veces en casa que fuera», advirtió. En otro orden de cosas, la lesión que sufrió Montáñez a falta de dos minutos fue la peor noticia del choque de ayer. Aún no se sabe a ciencia cierta el alcance de su dolencia, pero todo apunta a que el escolta catalán padece un esguince en su tobillo. El conjunto bilbaino procede hoy mismo a hacerle a Montáñez las pertinentes pruebas médicas.
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