Patxi Larrainzar, dia de inauguraciones
Ha llegado el momento de la inauguración. Hemos estado todos. Por un lado, los representantes de la Administración Educativa. Por otro; el alumnado, los padres y madres y el profesorado. Ellos, el viernes por la mañana con fotógrafos oficiales; nosotros, el mismo día qué casualidad pero por la tarde, y sin fotógrafos. Separados. Seguramente porque para nosotros esta inauguración es sinónimo de celebración y para ellos, una obligación a regañadientes.
Habrá quienes digan: «¿Ves como este Gobierno gobierna para todos?, también para los que eligen el euskara». «¿Ves como este Gobierno es sensible a las demandas de la ciudadanía?». «¿Ves?, el Gobierno no atiende sólo a la empresa privada, también se responsabiliza de la escuela pública»Š
Pero no nos engañemos. El actual Gobierno lleva una política activa en contra del desarrollo y la normalización del euskara, empezando por la educación en esta lengua. No atiende a la ciudadanía a no ser que lo que se cueza les pueda reportar algún beneficio partidista o pueda correr el riesgo de hacerles quedar malparados.
En el tema de nuestro colegio, la Administración no ha demostrado sensibilidad ni atención. Que era necesario algo distinto al viejo Ave María para acoger, y de esto hace ya doce años, al naciente Patxi Larrainzar, se veía venir; como también que no se habría hecho este nuevo edificio si no hubieran mediado huelgas, tensión, ruido, alboroto y la solidaridad de mucha gente.
Este Gobierno tiene muy claro que lo público significa gasto, pero también igualdad de oportunidades y justicia social. No están por la labor de dejar de ser la elite, de renunciar a manejar el dinero público como si de una empresa se tratara. A pesar de todo, han venido a inaugurar el nuevo edificio. ¡Como si se les hubiera ocurrido a ellos! ¡Como si hubieran ido de la mano de los padres y madres para entre todos encontrar soluciones! Es evidente que sus razones para celebrar esta inauguración son muy distintas de las nuestras.
Además, ¿alguien en la Rochapea piensa que con esto se ha acabado el problema? Por supuesto que no. En la Rochapea vive el 20% de niños de entre 0 y 5 años de Pamplona. Una cantidad enorme si consideramos que nuestra ciudad se divide en 15 barrios. Con la planificación educativa actual, en la Rochapea, de 10 alumnos que quieren estudiar en el barrio, sólo 7 lo tienen asegurado y no en el modelo lingüístico que desean. Los otros tres tienen que irse a otros barrios para estudiar y, únicamente si tienen suerte, lo podrán hacer en el modelo lingüístico que desean. Como sigue sin haber sitio para todos, Educación sigue planteando la zonificación del barrio, es decir, la restricción del derecho a estudiar en la Rochapea a una parte del vecindario.
Asimismo, seguimos con un número similar de niños que se escolarizarán el curso que viene, y además con un Buztintxuri-Euntzetxiki que aún no tiene colegio, pero sí vecindario y niños y niñas... Así que para este año esperamos todavía más niños que se quieran matricular en Patxi Larrainzar. Sin embargo, Educación ha proyectado que, junto con la actual ampliación, el colegio Patxi Larrainzar es de tres líneas y el colegio Ave María es de una. Por tanto, claramente insuficientes para atender la demanda.
Nosotros seguiremos luchando por lo que sabemos que es justo y necesario. La Rochapea exige ya un nuevo centro educativo en el barrio. Y, que no quepa duda, seguiremos celebrando esta inauguración sin dejar de mirar al futuro porque es motivo de celebración el trabajo, el tesón y la solidaridad de la gente que ha hecho posible que Patxi Larrainzar sea hoy lo que es. Un brindis y ¡salud!
Fernando Senosiain - En nombre de todos los integrantes de la Junta de la Apyma Patxi Larrainzar
Bera, Lesaka eta Arantzatik: eskerrik asko
Taillon-Gavarnieko mendikatean istripuan zendutako Xabier Saralegi Altzate, Luis Mari Pikabea Zubieta eta Xabier Zubieta Erkizia gazteen familiakook gure esker ona adierazi nahi dizuegu: agintari eta erakundeei, mendizale eta lagunei, lehenengo gorpuak menditik ateratzen eta gero beren sorterrira ekartze- ko baimenak egiten laguntzeagatik, korapiloz betetako lana izan baitzen. Bat banaka adierazi nahiko genizueke gure esker ona, baina hori ezinezkoa denez, hitz hauetan doakizue: eskerrik asko.
Batzuen izena gustura goraipatuko genuke hementxe bertan, baina bertzeak ahanztea ez da zilegi. Bakoitzak berak badaki zer eman duen. Guk ere bai badakigu. Gure esker ona zuentzat, eta Berako, Lesakako, ArantzakoŠ herriari.
Aunitz galdu dugu, baina aunitz da egunotan zuengandik jaso duguna, zuen besarkada bakoitza izan zaigu lagungarri. Milesker, bat banaka, denei.
Ana Larretxea, Garbiñe Santamaría, Pilar Zubieta, Saturnino Pikabea, Isidro Saralegi, Isabel Alzate, Antonio Zubieta, Karmen Erkizia...
El respeto para ahotsak
El movimiento Ahotsak ha sido la primera respuesta independiente de mujeres de Euskal Herria para la búsqueda de la paz y de la normalización política.
La creación de este movimiento ha puesto en evidencia el fracaso de la gestión de los hombres en la resolución de los conflictos fundamentales de la sociedad vasca. También supone el comienzo de la asunción activa, en primer plano, de esta responsabilidad por parte de las mujeres que se han sumado. Lo dejaron muy claro en el manifiesto del 2 de diciembre del pasado año: Sólo si las mujeres desempeñamos un papel activo, pleno e igual en nuestro pueblo, en nuestra sociedad, podremos sentar los cimientos de una paz duradera, y contribuir a la creación de una sociedad más justa, más democrática y más igualitaria.
Ninguna de las partes que participamos (de alguna manera) en el conflicto hemos sido capaces de llegar a acuerdos tan claros y de tanto calado como las mujeres de Ahotsak. Seguramente porque las gestiones y las decisiones están en manos de hombres que nos enquistamos en nuestras propias rémoras personales.
Después del día 30 de diciembre nos comenzamos a dar cuenta de que la cosa de un hipotético proceso no debía ser tal cual nos contaban a través de los medios de comunicación. No se puede entrar a valorar qué ha pasado pues no hay datos suficientes para intervenir. Salvo el de que ETA ha vuelto a actuar (por cierto llevándose por delante la vida de dos currelas) y que la represión política, policial, judicial del Estado se mantiene como siempre.
Pero Ahotsak es el aire nuevo y fresco que nos queda. Van a sufrir asedio, presión, silenciamiento. Porque no van en sintonía con el ritmo y los intereses que marcan las posiciones hegemónicas de los hombres en los partidos políticos y en las organizaciones armadas.
Como hombre y como activista social exijo respeto para Ahotsak. Sólo ellas pueden y deben decidir sus acciones y sus omisiones, sus acuerdos y sus desacuerdos, su presente y su futuro.
Las mujeres de Ahotsak nos dieron una lección hace unos meses con sus acuerdos y ahora nos corresponde respetar lo que puedan decidir en las presentes condiciones políticas. Porque sus conclusiones volverán a ser en estos momentos más lúcidas, más coherentes, más responsables, más razonables que las que ya estamos repitiendo los hombres.
Javier Ruiz - Activista social (Trebiñu)
Quisiera
Ser más imaginativo, para ser menos plasta, pero cada vez lo veo más difícil, y en gran parte es lógico. Todos los días hacemos y decimos parecidas cosas, nos relacionamos con las mismas personas, trabajamos en la misma empresa, dormimos en la misma cama, comemos, bebemos y alternamos, los mismos alimentos, las mismas bebidas y en los mismos bares... y todas estas funciones nos hacen ser monótonos por naturaleza.
Quisiera no ser tan pelma, pero necesitaría una memoria matemáticamente exacta e inmensa y una gran sabiduría enciclopédica, que no es mi caso, y lo mismo le debe pasar a gran parte de la ciudadanía. Si bien es cierto que, aunque huelan mal, hay cuestiones fisiológicas por muy repetitivas que sean que no las podemos evitar por nuestra condición animal, y hay otras que, al ser más o menos racionales o inteligentes las repetimos continuamente y no para disfrutar, mejorar, ayudar y respetar, sino más bien todo lo contrario, prioritamos gene- ralmente el interés particular ante el bien general, el corto plazo a las altas miras y logros de largo plazo, pensamos que de esta forma engañamos al vecino, pero el vecino actúa igual, y al no poner freno y no tirar de la cadena para que, tanta miseria y mezquindad, vaya por los desagües, unos y otros nos volveremos a engañar, y ese proceso que tanto decimos que necesitamos no se afianzará. Quisiera no ser tan repetitivo, pero la historia se repite y todos somos partícipes del mismo cuento de nunca acabar, los que viven del cuento a cuenta de los demás nunca tirarán de la cadena, su avaricia de riqueza y poder les embota ciertos sentidos, ven lo que les interesa, huelen lo que quieren, escuchan lo que les halaga, sienten si les pinchas y tienen un gusto tan refinado que, no sólo se ponen unos sueldazos desorbitados, que todos pagamos, sino que exigen una dieta diaria, como el sueldo de un mes de muchos currelas.
Quisiera es una utopía, querer y hacer es real, prometer y no dar se está convirtiendo en habitual, quisiera que el que está dispuesto a bajar a los infiernos para dialogar con el diablo lo haga en la tierra sin trabas ni condiciones. Está más cerca.
Si entre el quisiéramos y el queremos o entre el dicho y el hecho no hubiese trecho y lo que queremos para nosotros lo quisiéramos para los demás, hoy estaríamos hablando en paz, sin condiciones, con respeto, en libertad, y la palabra, quisiera, la usaríamos para cantar y en la cama para soñar.
Modesto García Marañon
Gasteiz
Hau da gipuzkoarako eta euskal herrirako zure egitasmoa?
Kontatu nahi dizuet zer gertatu zitzaigun gure lantegian Gabonak bukatu bezain pronto.
Abenduaren 29 zen. Lankide guztiak oporretan geunden. Etxean oso lasai nintzen. Halako batean, atea jo zuten eta nire aurrean postaria agertu zen. Burofax bat ze- karren niretzat.
Gutuna ireki nuen eta nahiko harrituta geratu nintzen. Lantegitik bidali zidaten gutuna. Gutun horretan jartzen zuen lantegia betirako itxiko zutela. Lankide guztiekin egon nintzen eta gutun berdina zuten. Oraindik azalpenik gabe jarraitzen dugu. Gizarte Segurantzan jarraitzen dugu kotizatzen. Lantegia Irunen dago, Gikautxo da. Errudunak izena eta abizenak ditu: J.C. de la Granja Salaberria.
Nestor Alvarez - LABeko afiliatua
|