Los máximos dirigentes de la UE celebraron ayer en Hungría y Eslovenia la ampliación del espacio Schengen a nueve nuevos estados. El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y el presidente de turno del Consejo Europeo, José Sócrates, subrayaron la importancia de la ampliación del espacio Schengen, que afecta a 400 millones de personas y pasa de quince estados a 24.

En un viaje relámpago a Afganistán, la primera que realiza un presidente del Estado francés, Nicolas Sarkozy subrayó que «el mundo no puede perder la guerra» en ese país y prometió «apoyo político y militar».

Durante la guerra entre Israel y la milicia libanesa Hizbullah que se registró en el verano de 2006 fallecieron 1.191 civiles libaneses y resultaron heridos 4.400. Al otro lado de la frontera, 44 ciudadanos con pasaporte israelí murieron y 4.262 fueron heridos. La mayoría de ellos eran palestinos (árabes) y murieron porque el Ejército de Israel colocó en sus pueblos baterías de artillería, convirtiéndolos en objetivo de los imprecisos cohetes artesanales de Hizbullah.

Grecia, Bulgaria y Rumanía defendieron ayer que la UE acelere el acercamiento hacia Serbia, aunque destacaron que esta medida no debe ser interpretada como una compensación a Belgrado por asumir la futura independencia de Kosovo.