Mientras Yolanda Barcina repartía sonrisas en la Fiesta del Libro, un centenar de bibliotecarios se concentraban en la Plaza del Ayuntamiento para mostrar su rechazo a la «censura» y la «injerencia» de UPN en su trabajo. El veto que este grupo ha impuesto a GARA y «Berria» en las bibliotecas públicas de Barañain e Iruñea ha dado lugar al manifiesto «Bibliotecas públicas para todas las personas», suscrito ya por más de 400 profesionales y 18 asociaciones del sector.

Iñaki Vicente, presidente de FEVAAS, subrayó ante los prejubilados forzosos, pensionistas y viudas la necesidad de salir a la calle para que «se conozca que llevamos 15 años percibiendo unas pensiones entre un 30% y un 40% inferiores, a pesar de haber cotizado más de 40 años» o sin que se eleve la pensión de viudedad del 52% al 70%. Llamó a acudir a la manifestación del 20 de mayo, que se celebrará en Bilbo y que está apoyada por asociaciones estatales de pensionistas.

Mientras la Audiencia Nacional española decretaba durante la madrugada de ayer cárcel para cuatro de los detenidos el sábado, y prorrogaba el arresto a Guerra; Martitegi, Azpitarte y Uriarte ingresaban en sendas cárceles francesas. Una vez allí pudieron relatar la actuación «violenta» de los policías que, explicaron, les propinaron patadas y les pisotearon.

El sudafricano Congreso Nacional Africano (ANC) invitó a sus seguidores a celebrar su contundente victoria electoral, al lograr más del 66% de los votos escrutados y acercarse a los dos tercios que le permitirían mantener la mayoría.

Catalunya amaneció y anocheció desbordada de libros y rosas. En la Diada de Sant Jordi las calles de Barcelona, y del Principat en general, se llenaron como cada año de puestos repletos de páginas y pétalos. La gente tomó las calles en busca del best-seller del año, de la firma del escritor de moda o de algún ejemplar especial. La lectura fue ayer el eje de un día festivo a la catalana.