ARMAGH
Los primeros ministros británico e irlandés, Tony Blair y Bertie Ahern, presentaron ayer públicamente en Armagh su hoja de ruta para reinstaurar las instituciones norirlandesas, bloqueadas por el veto unionista desde octubre de 2002.El plan, filtrado a la prensa hace una semana, prevé para el 15 de mayo la constitución de la Asamblea de Stormont, elegida en las elecciones de otoño de 2003. Los diputados tendrán hasta el 24 de noviembre de este año para formar el Ejecutivo. «Llegados a ese punto, cerraremos un capítulo o cerraremos el libro», advirtió el premier británico.
Ambos mandatarios coincidieron en utilizar un lenguaje de ultimátum. «La hora de la última decisión ha llegado», señaló Blair; «Es hora de hablar y de decidir», incidió Ahern.
Por si el destinatario del mensaje no estaba claro el DUP, vencedor en los comicios, se niega a compartir Ejecutivo con Sinn Féin, la furibunda reacción del líder de esta formación, Ian Paisley, le volvió a dejar ayer en evidencia.
Una reacción que, en primera instancia, tiene que ver con la amenaza, implícita en la hoja de ruta, de dejar sin sueldo ni bonificaciones económicas a los parlamentarios de Stormont.
Pero más decisivo para explicar la ira de Paisley resulta el compromiso, por parte de Londres y Dublín, de implementar los Acuerdos de Viernes Santo sea cual sea el resultado de esta nueva iniciativa. Ahern fue explícito: A falta de un acuerdo, los dos gobiernos «harán frente a sus responsabilidades» y pondrán en marcha el acuerdo de paz «en su esencia», señaló el taoiseach irlandés, que añadió que «los dos gobiernos no tenemos poder para forzar un acuerdo, pero podemos crear las condiciones necesarias para lograr el éxito».
Y en esta «creación de las condiciones necesarias», el plan de Londres y Dublín establece un escenario sin posible marcha atrás o componendas.
El premier británico advirtió de que, a falta de acuerdo, las elecciones a la Asamblea de Stormont previstas en mayo de 2007 «serían anuladas (...) La gente hallaría absurdo continuar de esta manera», añadió.
En una invitación-advertencia a los unionistas, Blair concluyó que «yo no digo que la desconfianza vaya a desaparecer completamente, pero no debemos dejarla reinar».
El presidente de Sinn Féin, Gerry Adams, reiteró un nuevoo llamamiento público a los unionistas: «Pido al unionismo que aproveche esta oportunidad. Se trata de construir un futuro para toda la gente de esta isla», recordó.
Valoración de Sinn Féin
El presidente de la formación republicana celebró la prontitud con la que será constituida la Asamblea, aunque no eludió mostrar su preocupación por algunos aspectos del calendario de la hoja de ruta.Adams destacó el compromiso por parte de Londres y Dublín en implementar los Acuerdos de Viernes Santo frente al veto unionista.
También mostró su satisfacción por el hecho de que el plan contempla, en el interregno hasta noviembre, rondas de negociaciones entre los partidos norirlandeses para poner en marcha políticas para esta parte de la isla.
A juicio de Adams, representa una buena oportunidad para que los diputados tomen decisiones sobre el norte de Irlanda con más criterio que la Administración británica.
GARA
BELFAST
El reverendo Ian Paisley, líder del DUP, denunció que la hoja de ruta presentada en Armagh supone un incremento de lo que no duda en calificar de «injerencia» del Gobierno de Dublín en los asuntos de la parte norte de la isla irlandesa.
«Esta parte del Reino Unido no es realmente parte del Reino Unido, sino una parte del Reino Unido donde un Gobierno extranjero tiene más poder sobre Irlanda del norte que los propios norirlandeses», vociferó el reverendo tras la presentación del plan.
Paisley reaccionó con esta diatriba al anuncio, por parte de Londres y Dublín, de que, en casso de que su formación siga bloqueando la creación del Ejecutivo, trabajarán juntos para implementar los Acuerdos de Viernes Santo.
Uno de los acuerdos establece la cooperación entre el norte y el sur de Irlanda, cuestión, entre tantas otras, que levanta ampollas en el DUP de Paisley.
El reverendo afirmó que la constitución de la Asamblea es «uno de los aspectos más positivos» del plan
Cumplió ayer 80 años
La presentación del plan coincidió con el ochenta cumpleaños del líder unionista, quien reiteró que no se dejará «intimidar» por Londres y Dublín para compartir el Ejecutivo con los republicanos.
Paisley reeditó su vieja y manida «tesis» de que el principal obstáculo para avanzar en el proceso es «la continua actividad paramilitar y delictiva del IRA (...) De momento, no hay pruebas que apunten a que abandonará sus actividades criminales para noviembre», añadió.
Abiertas todas las hipótesis sobre la muerte de
Donaldson
La directora de la Garda --la Policía irlandesa--, Terry McGinn, que dirige la investigación de la muerte del espía de Londres en el seno de Sinn Féin, Denis Donaldson, aseguró que mantiene abiertas todas las hipótesis. Apuntó a que «su residencia fue cuidadosamente rodeada y una unidad organizada más que un individuo aislado participó en lo que equivale a una ejecución». -