LOS ANGELES
Autoridades del condado de Los Angeles emitieron el viernes una advertencia a sus empleados para que se abstengan de participar en el boicot del Primero de Mayo o podrían enfrentarse a posibles acciones disciplinarias. A través de circulares, se indicó que los empleados deberán obtener una autorización previa de sus superiores para faltar, «porque la prioridad estará en ofrecer ese día los servicios al público. Respetamos los derechos de libertad de expresión de los empleados, pero se necesita mantener la posibilidad de atender al público en ese día laborable», se apuntó.
En Estados Unidos, el Día del Trabajo no se festeja como en otros países, sino en setiembre. «Cualquier empleado que se ausente ese día sin previa autorización podría ser sujeto a una acción disciplinaria considerada como ausencia sin derecho a pago», advirtió la circular.
«Algunos directivos están enviando memorándums a empleados y otros lo hacen de viva voz», reconoció Jim Adams, jefe de la división de relaciones con trabajadores perteneciente a la oficina del administrador del condado de Los Angeles.
Sólo en «su tiempo libre»
Jim Adams añadió que los trabajadores «tendrán el derecho de participar en esas movilizaciones, pero lo podrán hacer en su tiempo libre después de presentarse a trabajar, porque esa es una obligación que tienen que cumplir». Organizaciones pro inmigrantes llaman a la celebración de un boicot económico para el Primero de Mayo, el cual incluye no acudir al trabajo, escuelas, no comprar productos y servicios y participar en marchas para llamar por una reforma migratoria amplia y justa.
La ciudad de Los Angeles, como la mayoría de los centros laborales, establece que para ausentarse en el empleo, se debe conseguir un permiso previo autorizado por sus superiores.
Detenciones ilegales
Los mensajes intimidatorios no son el único problema al que se enfrentan estos días los trabajadores inmigrantes en EEUU. Esta semana ha tenido lugar la mayor redada laboral en la historia de Estados Unidos, en la que fueron detenidos 1.187 sin papeles que trabajaban para la empresa IFCO Systems, después de que el secretario estadounidense de Seguridad Interna, Michael Chertoff, anunciara en Washington una «nueva estrategia» para hacer cumplir las leyes de migración mediante un programa de tres puntos: identificar y proceder a la deportación de indocumentados, castigar a las empresas que los empleen, y también a las «bandas de traficantes». Además, los trabajadores pueden ser arrestados ilegalmente. El consulado de México en El Paso, Texas, denunció que los alguaciles del departamento del sheriff efectúan detenciones de sin papeles sin estar autorizados, ya que es una actividad exclusiva de la Patrulla Fronteriza de EEUU.
Socorro Córdoba, portavoz de la legación, dijo que los operativos de los alguaciles son ilegales, por lo que su oficina iniciará una campaña para dar a conocer a los mexicanos que si sus captores no son agentes de la corporación estadounidense les están violando sus derechos civiles. El Gobierno federal ha entregado 100 millones de dólares a estos alguaciles para aplicar medidas de seguridad en la frontera.
