Los empresarios obtendrán entre 850 y 3.200 euros por contrato fijo
El Gobierno español, presidido por José Luis Rodríguez Zapatero, las patronales CEOE y CEPYME, CCOO y UGT firmaron ayer en la Moncloa la quinta reforma laboral. Del nuevo texto se desprende que serán los empresarios los principales beneficiados: se les abarata el coste por despido; se les ofrecen más ayudas por la extensión del «contrato fijo barato», de 850 euros a 3.200 euros; y se les reducen las cotizaciones.
BILBO
La nueva intervención en el mercado laboral, acordada en Madrid y a espaldas de los intereses de los vascos, busca como objetivo primordial reducir la elevada tasa de temporalidad, que duplica la media de la Unión Europea. Terminar con la precariedad del mercado de trabajo es necesario, a juicio de todos los agentes sociales, pero en el texto de la reforma laboral firmada ayer no se traduce con nitidez esa demanda de la sociedad, más bien se ve un escenario borroso en el que los trabajadores volverán a estar a merced de los intereses de los empresarios. Tampoco fija unas reglas de juego definidas para que la contratación laboral no sea, como ocurre ya, un elemento de fraude generalizado. La nueva reforma entrará en vigor a partir del próximo 1 de julio de este año.El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, pronosticó en el acto protocolario de la firma en el Palacio de la Moncloa que «mejorará el largo período de crecimiento económico que estamos experimentando»y premió «la actitud ejemplar de los agentes sociales» y su «voluntad de compromiso con el país». El ministro español de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, afirmó que la reforma «huye de las recetas de laboratorio y combina flexibilidad y seguridad laboral», por lo que aseguró que «tendrá efectos positivos sobre la rentabilidad de las empresas, las inversiones y el empleo».
Reducción de cotizaciones
Las principales claves de la reforma se sitúan en cuatro grandes líneas: abaratamiento del despido; ayudas directas y reducción de las cotizaciones de los empresarios; control tenue del encadenamiento de contratos laborales y, por último, reforzamiento de la Inspección de Trabajo contra el fraude laboral existente.Los empresarios obtendrán bonificaciones a la contratación indefinida, que van de los 850 euros (mujeres, mayores de 45 años, jóvenes entre 16 y 30 años) hasta los 3.200 euros, para colectivos de parados, personas y personas con discapacidad). En algunos casos la ayuda se mantiene de manera cuatrienal y, en otros, en la totalidad de la vigencia del contrato fijo. También garantiza el abaratamiento de las indemnizaciones por despido para los contratos al objeto de fomentar la contratación indefinida y la fijeza de los contratos temporales suscritos antes del 31 de diciembre de 2007. En este caso se amplían los colectivos que pueden acceder a este contrato que supone la reducción de 45 a 33 días la indemnización por despido y también se rebaja el número máximo de mensualidades a percibir, de 42 mensualidades en el contrato indefinido ordinario a 24 mensualida- des en el nuevo contrato fijo. La nueva reforma laboral permite a los empresarios la reducción de las cotizaciones sociales. «Se reducirán las cotizaciones empresariales por desempleo de los contratos indefinidos, disminuyendo 0,25 puntos la cotización desde el 1 de julio de 2006, pasando del actual 6% al 5,75%, y un 0,25% adicional desde el 1 de julio de 2008, pasando del 5,75% al 5,50%». De esta manera, la rebaja de las cotizaciones sociales de los empresarios llegan al 0,50%. Por otro lado, «se igualará la cotización empresarial por desempleo de los contratos de duración determinada a tiempo completo, celebrados por las empresas de trabajo temporal a la de contratación de duración determinada directa, pasando del actual 7,7% al 6,7% desde el 1 de julio de 2006», lo que significa un impulso a las ETT. A la vez, los empresarios reducirán la cotización al Fondo de Garantía Salarial, «hasta el 0,2% desde el 1 de julio».
Encadenamiento de contratos
Otra de las medidas que prevé la reforma es la limitación del encadenamiento de los contratos temporales. En la actualidad el fraude es generalizado. De hecho, CCOO de Euskadi señaló ayer que un 53% de los contratos firmados en 2005 en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa «fueron encadenados». Con la nueva legislación, «los trabajadores que en un período de treinta meses hubieran estado contratados durante un plazo superior a veinticuatro meses, con o sin solución de continuidad, para el mismo puesto de trabajo en la misma empresa, mediante dos o más contratos temporales, sea directamente o por ETT, adquirirán la condición de trabajadores fijos».En este caso, deja en manos de la negociación colectiva «la prevención abusiva de contratos de duración determinada con distintos trabajadores para desempeñar el mismo puesto de trabajo cubierto anteriormente con contratos de ese carácter». El fraude en la actualidad es elevado, por lo que la reforma establece reforzar la Inspección de Trabajo.
ELA: «La patronal ha logrado su objetivo»
ELA mantiene un tono «muy crítico» con la reforma laboral pactada en Madrid. Señaló que «es un fraude a los trabajadores. Es una nueva transferencia de renta a los empresarios. Es un parche más de una reforma inacabada que, una vez más, beneficia a los empresarios». Adolfo Muñoz, responsable de la Ejecutiva del sindicato, reconoce que «la patronal, siempre desde una posición de privilegio, ha vuelto a condicionar una reforma laboral para seguir lesionando derechos de los trabajadores». A juicio de ELA, «la patronal ha conseguido su objetivo con el apoyo de CCOO y UGT. Así de claro». -
LAB llama a la movilización contra la reforma laboral
J.BASTERRA
BILBOLAB realizó una primera valoración de la quinta reforma en base al documento oficial y denunció que «es una imposición desde Madrid a la clase trabajadora vasca». Llamó a la movilización «para desenmascarar el falso discurso de los firmantes para vender este nuevo fraude a la clase trabajadora». La central que lidera Rafa Díez advierte que «estamos ante un nuevo ataque a los derechos de los trabajadores en beneficio de la patronal» y añade que «se abre una nueva vía a la precarización del empleo». Para LAB, «hay que decir alto y claro que esta reforma no va a ser efectiva para crear empleo estable y de calidad, para reducir las escandalosas cifras de temporalidad, ya que abaratará el despido y aumentará los beneficios de los empresarios». La central reclama un marco propio de relaciones laborales para hacer frente a este tipo de imposiciones. Ante las reducciones de cotizaciones, insiste en que «se regala dinero público a la patronal». En relación al encadenamiento de contratos, LAB critica que no tenga un «efecto retroactivo», a la vez que lamenta el escaso éxito de la Inspección de Trabajo, «aunque se refuerce».
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