BAGDAD
El atentado ocurrió en el centro de Tal Afar, provincia de Nínive y cerca de la frontera con Siria, cuando un camión hizo explosión momentos antes de la hora de cierre del mercado, cerca de una comisaría dentro de la zona del mercado. De momento se desconoce si se trata de un atentado suicida.La Policía iraquí teme que el número de víctimas mortales aumente con las horas, dado que muchos de los heridos están graves.
El 27 de marzo pasado un atentado similar contra una base militar conjunta estadounidense-iraquí en esa misma ciudad, dejó al menos 30 soldados muertos y 20 heridos. Esa base, que era utilizada como centro de reclutamiento de paramilitares, también fue blanco de un ataque suicida en junio del 2005 que causó 16 muertos.
Asimismo, ayer cuatro policías murieron en un ataque en la provincia de Al Anbar, al oeste de la capital iraquí, informaron fuentes de seguridad locales.
Los cuatro policías perdieron la vida al ser acribillados por los atacantes cuando salían de la sede de la gobernación de la ciudad de Ramadi, capital de Al Anbar, precisaron las fuentes.
Las mismas fuentes indicaron que un grupo de desconocidos asesinó a tiros anoche al jeque Omar Said Hauran, miembro de la Organización de Ulemas de Irak, la más importante institución religiosa suní.
El mando militar ocupante también anunció la muerte de un estadounidense el lunes al estallar un artefacto explosivo al paso de una patrulla.
Entretanto, unos 244 refugiados palestinos, la mayor parte de los cuales han permanecido deambulando en la frontera entre Jordania e Irak durante dos meses tras huir de la violencia en territorio iraquí, fueron autorizados a cruzar a territorio sirio, donde serán acogidos bajo el estatus de refugiados.
Así, nueve autobuses de palestinos, 181 de los cuales habían permanecido acampados desde mediados de marzo en la frontera de Trebil, en territorio iraquí, pasaron hoy por el cruce fronterizo de Tanef a 300 kilómetros al noreste de Damasco, bajo el auspicio de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
El grupo de recién llegados a Siria, que incluye a unas 41 mujeres y 70 niños, había sido vetado previamente por Jordania para entrar en su territorio.