18ª etapa:
Morzine Avoriaz Mâcon, de 197 kilómetros.
Características:
Superados los colosos alpinos, el recorrido presentaba tres puertos de 2ª, 3ª y 4ª categoría y 50 kilómetros finales sin ninguna complicación.
Clasificación de la etapa:
1. Matteo Tosatto (QuickStep)4h16’15’’
2. Cristian Moreni (Cofidis)m.t.
3. Ronny Scholz (Gerolsteiner)a 2’’
4. Manuel Quinziato (Liquigas)a 47’’
5. Sébastien Hinault (Credit A.)a 1’03’’
6. Jérôme Pineau (Bouygues)m.t.
7. Sylvain Calzati (AG2R)m.t.
8. Benoît Vaugrenard (Fdejeux)m.t.
9. Iñaki Isasi (Euskaltel)m.t.
10. Egoi Martínez (Discovery)m.t.
Incidencias:
La jornada volvió a transcurrir bajo un fortísimo calor, pese a lo que se alcanzaron los 46’126 kilómetros/hora de media. Oscar Freire no tomó la salida y David López se retiró a los pocos kilómetros.
DONOSTIA
El Tour recuperó la cordura en vísperas de la etapa que debe dejarlo decidido. Lo sintieron los adictos al ciclismo con kilates y lo agradecieron los gallos de la carrera:nada se salió del guión esta vez, por lo que pudieron descansar y ceder el protagonismo a los aventureros de turno.Muchos lo agradecieron echándose una siestecita que ha resultado imposible en las espectaculares jornadas precedentes;algunos encontraron alicientes para seguir pegados al televisor. Por ejemplo, la presencia de dos corredores vascos Iñaki Isasi y Egoi Martínez en la escapada del día.
Parecía claro que la etapa debía decidirse como lo hizo. Los sprinters reservan fuerzas para Paris, los primeros clasificados para la contrarreloj de esta tarde, sus equipos se recuperan del palizón...;y el terreno, pese a la ausencia de complicaciones en los últimos cincuenta kilómetros, también invitaba a probar a los aventureros, especialmente a los integrantes de equipos que todavía no han podido alzar los brazos y que veían en la de ayer su última oportunidad de brillo.
Efectivamente, tras unos primeros escarceos a cargo de Millar o Popovich, la fuga buena del día nacía en el kilómetro 48, con 15 integrantes, Zabriskie, Sinkewitz, Calzati, Leipheimer, Scholz, Flecha, Aerts, Tosatto, Hinault, Moren, Vaugrenard, Quinziat, Pineau y dos euskaldunes:Egoi Martínez, al que las caídas no le han quitado ganas, y un Iñaki Isasi que recuperaba el protagonismo de la primera semana, tras haber pasado a un segundo plano en la jornadas de montaña. Sin nadie peligroso de por medio, los capos dieron el visto bueno y dejaron hacer, con la única excepción de un Saunier Duval que no había conseguido meter a nadie en el grupo. Su trabajo no fue suficiente para neutralizar una distancia que se mantuvo casi siempre sobre los cuatro minutos aumentó al final, cuando los de Matxin decidió arrojar la toalla, con lo que la emoción del día se trasladó a la pelea entre los propios integrantes de la escapada.
Probó Egoi y, casi de inmediato, fueron Isasi y Leipheimer los que protagonizaron un intento con visos de éxito. Pero por una vez, los de detrás se pusieron de acuerdo y acabaron cazándolos. No sucedió lo mismo cuando, a quince kilómetros del final, saltaban Moreni, Tosatto y Scholz.
Se estrena Quick Step
Mientras la docena restante se miraba en busca de responsabilidades, el trío de cabeza metió la quinta. La peor parte se la llevó Ronny Scholz dos corredores veteranos y, para más señas, italianos, no parecen la mejor compañía, prácticamente el único que trabajó en los últimos kilómetros, y la mejor Mateo Tosatto.El corredor transalpino ejerció de Tom Boonen para el que acostumbra a trabajar en los sprints y se impuso en la recta final, logrando el primer triunfo de Quick Step en este Tour.
La exhibición de Landis camino
de Morzine sigue dando que hablar
MACON
Aunque todas las mentes están puestas ya en la contrarreloj que hoy decidirá el Tour, la exhibición de Floyd Landis camino de Morzine sigue dando que hablar, precisamente porque le permite afrontar esta penúltima etapa como máximo candidato al triunfo final.Lógicamente, el papel realizado el jueves por equipos como TMobile o, sobre todo, CSC, sigue siendo uno de los focos de atención. El director de este último Bjarne Riis considera que el máximo responsable de lo sucedido fue el equipo del líder. «Honestamente, creo que fue el Illes Balears el que le dio el maillot amarillo. Tenía que habérsela jugado, ir más rápido en el Col de la Colombiere y esperar que nosotros les ayudásemos más tarde». El excorredor danés asume que su equipo no hizo «lo correcto» desentendiéndose durante tanto tiempo, pero justificó su decisión por el hecho de no quemar a sus ciclistas.
Prácticamente lo mismo venía a decir Carlos Saste. «Si mi equipo se pone a tirar en La Colombiere, descolgamos a Jens (Voigt) y no tenemos a nadie para tirar en el llano. A lo mejor eran otros los que tenían que haber tomado cartas en el asunto», afirmó el abulense para el que, además, «hay que hacer otro análisis, y es que Landis se salió del mapa».
Lo mismo opinaba Johan Bruyneel (Discovery), que «nunca antes había visto éso, estoy muy impresionado. Estaba seguro de que iba a atacar, pero no me imaginaba que iba a hacerlo tan bien». Michael Rogers (TMobile), por su parte, tildó a Landis de «Superman. Cuando dejó a todo el mundo, la subida estaba a 10% y él avanzaba a ¡36-38 km/h!».
El pelotón vasco pierde a su tercer corredor
14 corredores vascos quedan en el Tour el grupo más nutrido, por cierto, después de franceses e italianos de los 17 que salieron de Estrasburgo. Iban Mayo se bajó de la bicicleta en el Peyresourde, Alberto Martínez lo hizo un día después, camino de Carcassone, y ayer le tocó a David López que, tras la paliza del Giro, no podrá acabar su primer Tour. Ayer, además, no tomó la salida Oscar Freire. No podrán decirle nada en Rabobank al ciclista cántabro, teniendo en cuenta que ha logrado dos victorias. -
