Los aviones israelíes bombardearon ayer por primera vez la ciudad de Sidón
Israel no descarta el envío de fuerzas de la OTAN a la frontera con Líbano
·Las tropas internacionales establecerían una «franja de seguridad» de 20 kilómetros en la frontera con Líbano
El ministro israelí de Defensa, Amir Peretz, manifestó ayer la disposición de su Gobierno a aceptar el despliegue de una fuerza multinacional de la OTAN en la frontera entre Israel y Líbano, donde se crearía una «franja de seguridad» de 20 kilómetros. Antes de este despliegue Israel deberá declarar un alto el fuego, para lo que Estados Unidos le concede un plazo de una semana que le permita proseguir su campaña de destrucción.
BEIRUT
El ministro israelí de Defensa, Amir Peretz, manifestó ayer la disposición de su Gobierno a aceptar el despliegue de una fuerza multinacional en la región de Líbano que linda con Israel. Peretz hizo estas declaraciones tras una entrevista con el ministro alemán de Asuntos Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, uno de los diplomáticos que visitan estos días Israel. Estados Unidos, por su parte, le da una semana más de plazo a Israel para que apure su campaña de destrucción. Según el diario israelí “Hareetz”, la secretaria de Estado de EEUU, Condoleezza Rice, que llegará hoy a Israel, ha concedido a su protegido siete días más antes de anunciar el cese de hostilidades. “Hareetz” señala que el próximo domingo, día 30, Israel estará listo para declarar un alto el fuego, justo cuando Rice vuelva a visitar por segunda vez el país judío. Tras la reunión semanal del Consejo de ministros, Israel insiste en que se deben cumplir tres condiciones para que acepte un alto el fuego: la liberación de los dos soldados capturados por la guerrilla libanesa, la retirada de ese grupo de la zona de frontera con Israel y que sea desarmado. El eje EEUU-Israel pretende que, una vez declarado el cese de hostilidades, se cree en el sur de Líbano una franja desmilitarizada de 20 kilómetros. Con esto buscan que Hizbula no pueda acercarse a la frontera con Israel desde donde los milicianos lanzan sus cohetes contra localidades israelíes.
Ejército libanés «débil» Con respecto a la fuerza internacional, Israel explicó su cambio de postura diciendo que se ha dado cuenta de que el Ejército libanés es «demasiado débil» para desplazar a Hizbula de la frontera, por lo que ahora están dispuestos a aceptar una fuerza internacional. No obstante, Peretz exige que sea de la OTAN, porque, en su opinión, la actual Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (UNIFIL) no tiene autoridad suficiente.
Además de Rice y de Steinmeier visita actualmente Israel el ministro de Asuntos Exteriores del Estado francés, Philippe Douste-Blazy. Todos ellos se entrevistarán con su colega israelí, Tzipi Livni, con el de Defensa, Amir Peretz, y con el primer ministro, Ehud Olmert. Tanto Rice, como sus colegas francés y alemán también se entrevistarán con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abbas. Por su parte, el presidente iraní, Mahmoud Ahmadineyad afirmó que Israel «ha pulsado el botón de su autodestrucción» lanzando la ofensiva militar. Aunque no ofreció detalles, sugirió que los estados árabes y otros países podrían en cierto sentido aislar a Israel y a sus principales aliados, liderados por Estados Unidos..
Bombardeo aéreo de un autobús de refugiados libaneses
GARA
BEIRUT La operación militar israelí sobre Líbano continuó ayer. Aunque Israel intenta justificar la devastación del sur del país y de la capital por su presunto objetivo de debilitar a la guerrilla libanesa Hizbula, ayer la aviación israelí bombardeó a un autobús que transportaba a evacuados y mató a tres de ellos. El autobús atacado transportaba a 16 personas que huían de la aldea de Tairi y se dirigían al puerto de Tiro. Un misil que alcanzó el autobús cerca de la aldea de Yaatar mató a tres personas e hirió a todas las demás, que fueron transportadas a hospitales de Tiro, dijeron fuentes oficiales. Con estas víctimas al menos son 375 las muertes causadas por ataques israelíes en los últimos 12 días, según el recuento oficial de las autoridades libanesas. Los muertos israelíes son 36, de los cuales 17 son personas alcanzadas por cohetes de Hizbula y 19 son soldados muertos en combate. Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) cifró ayer en 600.000 las personas desplazadas por el conflicto. Israel también atacó ayer el puerto sureño de Sidón por primera vez en esta campaña, donde destruyó una mezquita e hirió a cuatro personas. Sidón alberga a más de 35.000 personas que huían hacia el norte. Además, el Ejército israelí bombardeó una fábrica textil en la ciudad fronteriza de Al Manara, con un saldo de un muerto y dos heridos, confirmó el alcalde. El ataque israelí en el sur además provocó la primera víctima entre los periodistas que cubren los combates. Layal Nejib, de 23 años, y fotógrafa de la revista libanesa “Al Jaras”, murió cuando un proyectil israelí cayó cerca del taxi en que viajaba en la población fronteriza de Qana, dijeron fuentes de la seguridad. Mientras tanto, Hizbulá respondía a los ataques con el lanzamiento de una batería de al menos 93 misiles a ciudades israelíes, que ayer causaron dos muertos y 15 heridos en la ciudad israelí de Haifa. Además, un miembro italiano del equipo de observadores de la ONU en el sur del Líbano resultó gravemente herido durante enfrentamientos entre Hizbula e Israel. Lahoud cree que Israel ataca «a ciegas»
El presidente libanés, Emile Lahoud, cree que los bombardeos de Israel en el sur de Líbano son a ciegas. «Israel no ha podido mostrar hasta ahora una foto de las posiciones de la resistencia (de Hizbula) destruidas, por la sencilla razón de que no sabe donde están. Nadie sabe donde están, de ahí la naturaleza del problema», dijo Lahoud en el semanario alemán “Der Spiegel”. -
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