DONOSTIA

Una victoria en los Campos Elíseos no es una victoria cualquiera, y así, después de las fotos y bromas de rigor, felicitaciones varias y copas de champán, el tran-tran del centenar largo de kilómetros desde la partida en Sceaux y la capital francesa se convirtió en el habitual carrusel de ataques en el circuito parisino.

Aitor Hernández (Euskaltel) fue el primero en abrir hueco y el ermuarra también estuvo presente en un numeroso intento, con Txente García (Caisse d’Epargne) entre ellos, en el que Mikel Astarloza (Ag2r) ponía mucho empeño en que caminara. Pero la intentona no cuajó. Lanzó el esprint del grupo el aussie ­con Iñaki Isasi tratando de hacerse sitio, en vano­, pero se quedó corto y Hushovd, el ganador del prólogo, cerró el círculo con una incontestable victoria.

Hushovd, que restó importancia a no haber podido conseguir el maillot verde, dijo que «siempre es difícil ganar una etapa en el Tour de Francia, pero en los Campos Elíseos es lo máximo para un esprinter. Soñaba desde hace años con ganar aquí. Sufrí mucho en los Pirineos y los Alpes, pero tenía en mente esta etapa de París», dijo. Hushovd explicó que en esta ocasión le ganó la partida a su gran rival: «Hoy he sido más fuerte que McEwen y, en general, estoy muy contento con el Tour. Gané el prólogo por primera vez y lo mismo en los Campos Elíseos. Soy un corredor de pruebas por etapas y me siento cada vez más fuerte con el paso de los días, esprinto con más potencia», señaló.

Respecto a la lucha por el maillot verde señaló que ya lo consiguió el año pasado y queahora se alegra por McEwen, «que además ha ganado tres etapas», concluyó.