Nueva víctima por accidente laboral y una sentencia aislada
Un joven de 19 años, Christian Arriaga, que trabajaba para la empresa Papelera Georgia Pacific, falleció como consecuencia del accidente de tráfico que tuvo a la salida de su turno laboral a las diez de la noche del pasado lunes, en la localidad navarra de Allo. Se trata de una muerte de las denominadas in itinere, esto es, producida en el recorrido habitual entre el lugar de trabajo y el domicilio habitual. Un suceso que no siempre se recoge en las estadísticas de siniestralidad laboral, y ante el que difícilmente se podrán establecer responsabilidades. Precisamente ayer se conocía una de las escasas sentencias judiciales que sancionan a las empresas por su responsabilidad en un accidente laboral. La Sala de lo Social del TSJPV, última instancia a la que se podía recurrir, ha castigado a la empresa de transportes TOSA de Gipuzkoa a abonar un 30% de incremento de las prestaciones de Seguridad Social a favor de los familiares de un conductor fallecido en febrero de 2004, al caer sobre él la carga que trataba de asegurar al camión. Esta sentencia señala claramente que la empresa tuvo responsabilidad directa en el accidente, lo cual es excepcional, puesto que cada vez es más difícil, no sólo establecer las responsabilidades de un accidente concreto, sino que, por efecto de las sucesivas subcontrataciones, todavía es más complicado conocer exactamente para qué empresa trabaja en realidad. -
El PP de Laudio intentapresentarse ahora como víctima
La cuestión del concejal del PPde Laudio Mikel Urrechu, acusado de intentar incendiar las txosnas, no es un problema de acoso al edil, sino una evidencia del propio carácter del Partido Popular, que no tiene empacho en otorgar cargos públicos a personas que en repetidas ocasiones han demostrado el poco respeto que tienen por los ciudadanos y ciudadanas a los que en teoría deberían administrar. En la localidad alavesa lo saben bien, sobre todo aquellos que se lo han encontrado a determinadas horas. Resulta llamativo, por otra parte, lo que el PPha tardado en salir en defensa de su concejal. Al parecer, ha tenido que esperar hasta comprobar que determinados medios y el propio ayuntamiento optaban por poner sordina a un hecho evidente, que de haberse producido en otras circunstancias hubiera sido un verdadero escándalo, con consecuencias penales mucho más duras de las que en cualquier caso podrá sufrir el concejal del PP. Si lo que se hubiera intentado quemar no hubieran sido txosnas, sino otro bien, y también con «trasfondo político», como el alcalde de Laudio asegura que hay tras este intento de incendio, la investigación no hubiera quedado en manos de la Policía Municipal, se hubieran buscado pruebas además de las declaraciones de los testigos, el detenido habría sido incomunicado y conducido a la Audiencia Nacional por la Ertzaintza, el ataque hubiera ocupado las portadas de los medios de comunicación y la petición fiscal ascendería a varios años de prisión. El PP lo tiene difícil para presentarse como víctima. -
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