El DUP mantiene su política obstruccionista a pesar de las advertencias de Londres
Durante su intervención en la conferencia laborista, el delegado del Gobierno británico para el norte de Irlanda, Peter Hain, recordó a los políticos norirlandeses que encaran una «decisión histórica» este otoño: alcanzar un acuerdo que permita la reinstauración de las instituciones norirlandesas que fueron suspendidas hace ahora casi tres años o resignarse al gobierno desde Londres. Por su parte, el líder del unionista Ian Paisley (DUP), presente entre los delegados, dijo que no aceptará intimidaciones para forzarle a aceptar un gobierno con Sinn Féin para el 24 de noviembre.
DUBLIN
Durante su intervención ante el Congreso del Partido Laborista, el secretario de Estado británico aseguró que el pueblo norirlandés se sentía cansado y enfermo en el círculo vicioso en el que se ha transformado el proceso de paz. Por ello afirmó que la fecha límite del 24 de noviembre para que los partidos alcancen un acuerdo de gobierno autónomo para el norte de Irlanda se mantendrá, y que si este no se alcanza, la Asamblea reconstituida el pasado mes de mayo será disuelta una semana después. «Irlanda del Norte ha visto muchas fechas límites; muchas han llegado y han pasado, pero ésta está escrita en la ley porque no puede permitirse que el progresar se transforme en la finalidad», explicó Hain. El discurso de Hain se produjo después de que el líder del unionista DUP, Ian Paisley quien asiste a una conferencia del Partido Laborista por primera vez advirtiera de que «no responderá a amenazas o intimidaciones». Hablando durante un desayuno con la prensa, Ian Paisley dijo que el «imperio criminal del IRA» debe ser destruido si se espera que su partido, el DUP, considere sentarse en el gobierno con Sinn Féin. Incluso si se alcanza un acuerdo, Paisley quiere que sea refrendado en las urnas con la celebración de nuevas elecciones. Sin embargo, el tono beligerante de los representantes del DUP hace temer por el futuro del Acuerdo. Durante su encuentro con la audiencia laborista y los medios en la mañana de ayer, Paisley afirmó que no está preparado para «llevar a los padrinos de la violencia al gobierno». En respuesta a estos comentarios de Paisley, Hain dijo que aceptaba que la intimidación no funcionaría, pero que los políticos locales «no podían seguir moviéndose en un círculo vicioso continuamente». Los gobiernos de Irlanda y Gran Bretaña esperan que la presión interna sobre los líderes del DUP para aceptar la formación de gobierno con los republicanos se incremente a consecuencia de los informes de la Comisión de Verificación que monitorea las actividades de los grupos armados norirladeses y de la dureza de algunas decisiones que desde Londres se están tomando para el norte de Irlanda como la imposición de una tarifa para el agua, a la que se oponen tanto unionistas como nacionalistas y republicanos. Asimismo, también se está trabajando por un acercamiento en las posturas del DUP y Sinn Féin en el tema de la policía, ya que el DUP se niega a la implementación total de las recomendaciones del informe producido por el ahora comisario europeo Chris Patten, mientras que los republicanos las consideran un compromiso para su participación en los consejos policiales y su posible apoyo a la policía norirlandesa. El DUP quiere que Sinn Féin reconozca los consejos policiales y acepte el cooperar con la policía y el sistema judicial. Para ello Sinn Féin exige a Londres la transferencia de los poderes judiciales y policiales a la Asamblea norirlandesa y, por ello, Peter Hain presentó a finales del pasado año una legislación especial ante el parlamento británico que permitiría que esta transferencia se llevara a cabo tras la formación de gobierno, lo cual permitiría la creación de un nuevo ministerio en el gobierno norirlandés.
El Gobierno reforzará su ya represiva política interior
S.G.
DUBLIN Durante su intervención ante los delegados laboristas, el ministro del Interior, John Reid, afirmó que la política del Gobierno seguirá siendo la de confrontar a los «matones extremistas musulmanes» y defendió la alianza con los Estados Unidos en su política exterior. «No hay que amar todo lo que George W Bush defiende para odiar todo lo que defiende Osama Bin Laden», sentenció Reid. El tono del discurso ha aumentado la especulación de que Reid una de las pocas figuras dentro del laborismo que podrían competir con Brown estaría considerando el presentarse como candidato al liderazgo del partido. Reid confirmó que Blair le había pedido que revisará la capacidad «contra-terrorista» británica después del descubrimiento en el mes de agosto de un supuesto ataque contra vuelos transatlánticos y anunció que se producirán cambios legislativos que se darán a conocer durante el discurso de la reina británica este otoño. Prescott confirma que se irá con Blair
El viceprimer ministro británico, John Prescott, pidió perdón ante los delegados laboristas por haberle fallado al laborismo el pasado año, en referencia a su relación extramatrimonial con su secretaria y el haber aceptado regalos de un millonario estadounidense. Prescott confirmó que abandonará su cargo como segundo del partido cuando Tony Blair abandone su cargo de primer ministro. Ya se conoce el nombre de al menos tres candidatos para sucederle en el puesto: Jon Cruddas, Peter Hain y Harriet Harman.-
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