La CHE autoriza la captación de caudales de emergencia en Ullibarri-Urrunaga
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), José Luis Alonso, resolvió el pasado mes de diciembre autorizar la puesta en marcha de las obras de emergencia existentes en el sistema Ullibarri-Urrunaga, siguiendo el protocolo firmado por los usuarios de este sistema en 1992, por la situación de las reservas de agua. En estos momentos, ambos embalses no superan el 40% de sus reservas, con 59 y 26 hectómetros cúbicos, respectivamente.
BILBO
Según informó ayer la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), las actuaciones de carácter urgente permiten tomar caudales alternativos de forma temporal para los abastecimientos del sistema, ya que las reservas de los embalses de la Cuenca del Baias y el Zadorra se sitúan por debajo de la curva de garantía fijada por acuerdo de los usuarios de esta zona. La autorización para utilizar estas obras de emergencia, que fueron construidas a principios de la década de los años 90 del pasado siglo, fue solicitada por el Consorcio de Aguas Bilbao-Bizkaia y por Aguas Municipales de Vitoria, principales usuarios del sistema. Actualmente, Ullibarri y Urrunaga no superan el 40% de sus reservas, con un total de 59 y 26 hectómetros cúbicos acumulados, respectivamente. En este sistema se han priorizado en todo momento los usos de abastecimiento, según indicó la CHE. De hecho, desde la primavera de 2006 la empresa Iberdrola sólo realiza la turbinación hidroeléctrica del agua necesaria para garantizar los usos de abastecimiento. Las actuaciones de emergencia que se autoriza poner en marcha permiten derivar caudales alternativos desde el Nacedero Fuentes de Iturrihotz, en Araia (Asparrena), de donde se podrán desviar hasta un caudal máximo de 400 litros por segundo; del río de la Torca, en Langraiz (Iruña Oka), donde se derivará hasta un caudal medio de 300 litros por segundo; y del río Baias, en Subijana (Erriberagoitia), donde se derivará un caudal medio de hasta 500 litros por segundo.
El precedente más cercano
Euskal Herria sufrió una prolongada sequía durante el período 1988-90, que afectó, entre otras amplias zonas de nuestro país, a los abastecimientos del Bilbao Metropolitano y de la ciudad de Gasteiz, que toman agua del sistema de pantanos Ullibarri-Urrunaga.Con objeto de paliar los efectos de la escasez de abastacimiento de agua, se autorizó el uso de caudales de distintas cuencas y se realizaron obras de emergencia, financiadas en su momento por el Ministerio español de Obras Públicas, del que dependían tanto la Confederación Hidrográfica del Ebro como la del Norte (CHN). Una vez finalizado el periodo de sequía, estas captaciones se dejaron de utilizar y se retomó el sistema habitual. El 23 de marzo del año 1992 se suscribió un convenio para fijar su mantenimiento por los usuarios y exponer su uso en futuros periodos de escasez, cuando las reservas del sistema Ullibarri-Urrunaga se encuentran por debajo de las comentadas curvas de garantías. Precisamente, esos límites quedaron establecidos en el propio convenio.
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