EEUU e Irán celebraron ayer en Bagdad un primer encuentro de alto nivel calificado de «histórico» y consagrado exclusivamente a la cuestión iraquí. Esta reunión coincide paradójicamente con el aumento de la tensión bilateral por el programa nuclear iraní. El problema es que EEUU es consciente de que su «solución» para el Irak mayoritariamente chiíta pasa por Teherán. Y Teherán lo sabe. La negociación como la continuación de la guerra pero por otros medios.

Al margen de la pugna por el poder entre Viktor Yuschenko y Viktor Yanukovich, a los ciudadanos ucranianos les preocupa el alza permanente de los precios y los crecientes niveles de pobreza que se dan en el país.

Al menos seis civiles murieron ayer y otros 20 resultaron heridos tras la explosión de una bomba al paso de un camión militar al sur de Colombo, en un atentado que el Gobierno ceilanés atribuyó a la guerrilla tamil. Otros tres civiles y tres guerrilleros murieron el domingo.

Organismos palestinos advirtieron de que, de seguir los ataques israelíes, la franja de Gaza puede sufrir una «catástrofe humanitaria y sanitaria» y denunciaron «ejecuciones extrajudiciales» por parte de Israel. Censuraron también el «silencio» de la comunidad internacional.