DONOSTIA
Gonzalo Arkonada trasmitió tras el partido la sensación de que «el equipo está agarrotado. Después de ir por delante en el marcador, en la segunda parte nos hemos venido abajo y lo más importante es recuperar a los jugadores anímicamente. Este equipo ha demostrado que tiene calidad, ha hecho buenos partidos y debenos conseguir que sea capaz de volver a hacer eso».
Se le preguntó si el equipo puede sumar las cinco victorias necesarias y señaló que «todos nos quedamos con dudas tras este resultado, pero tenemos que mirar al futuro con optimismo. Quedan doce partidos por delante, suficientes para sacar esos quince puntos y alguno más. Hay que recuperar anímicamente al equipo, todos estamos muy tocados y tenemos pensar que a partir de ya hay que trabajar para preparar lo mejor posible el próximo partido».
Se le cuestionó por su actitud en los últimos veinte minutos, en los que no realizó ningún cambio «porque entendía que era lo más conveniente» y no dio muchas indicaciones. «Ausentes no estábamos, lo que pasa es que en ese momento el equipo estaba roto y preferimos no mover ficha».
Se le preguntó si se siente con el ánimo suficiente para salir adelante y respondió afirmativamente. «Sí, sí repitió el entrenador. En Primera División son mis primeros pasos, pero he vivido momentos parecidos y he sabido salir adelante y estoy convencido de que en esta ocasión también».
Sin que nadie le preguntara quiso «felicitar a la afición por el apoyo prestado durante el partido y entender que la broca final ha sido merecida».
Admitía que la remontada de ayer «es una situación que no hace más que repetirse. Debemos conseguir dar la vuelta a la situación, que el equipo recupere la confianza y la autoestima. Lo que no puede pasar es que vayamos ganando y que el rival, aunque hay que felicitarle, en la segunda parte ha sido superior a nosotros. Basta con ver las caras y el equipo trasmite suficiente. Hay que estar tranquilos y unidos», dijo un técnico que sobre Nihat comentó que «en la última disputa ha notado una molestia en la rodilla, estaba fatigado y ha solicitado el cambio porque no estaba en condiciones de aportar más». La Real se entrena hoy a las 9.30 dentro de un plan que no contempla día de fiesta porque la previsión es la de jugar el sábado a las ocho en campo de un Depor que tendrá las bajas de Duscher por sanción y Andrade por lesión.