Unai IRARAGORRI
BILBO
Todavía no ha debutado en el calendario vasco pero Roberto Barrientos es uno de los corredores llamados a pelear por los primeros puestos en el Torneo Euskaldun. El ciclista gasteiztarra del Caja Rural, que cumple su sexta temporada, ha calentado motores en la Vuelta a Alicante, y ya se ha dejado ver.
Cedido en el CAI, sus sensaciones en Alicante 15º han sido buenas. «Me he encontrado bastante bien y me ha venido bien para rodar».
Su debut vasco llegará en Villatuerta y Lizarra. Alternará el Euskaldun con la disputa de varias vueltas: Nafarroa, Bira, Palencia, Salamanca y Aragón.
Prefiere no marcarse metas concretas. «Siempre tienes ganas de superarte. Primero hay que hacer las cosas bien, y los resultados llegan si no tienen lesiones o ningún percance importante. Yo voy a hacer todo lo que pueda en cada carrera, sobre todo, en Navarra que es la vuelta de casa para el equipo. Estoy dispuesto a dar guerra».
Los dos últimos años, el Kaiku se ha nutrido del Caja Rural. «Tienes la esperanza de que se acuerden», confiesa. «Larrinaga o Losada no eran ganadores y les han dado la oportunidad. Es un aliciente, aunque tengo claro que hay que hacer las cosas bien desde abajo».
Son seis años en la categoría, y Barrientos estima que éste debe ser el último si no da el salto a profesionales. «El año pasado ya me lo planteé como el último, pero como me fue bien decidí darme uno más. Este año me costó centrarme en invierno pero, poco a poco, estoy más centrado y Alicante me ha venido bien».
Barrientos se define: «No soy un ganador y sí muy regular». De hecho, su primera victoria en la categoría llegó el año pasado en Urdiain. «No vencía desde juveniles» fue subcampeón de Euskadi con el Muebles Feguvior, confirma. «Esperemos poder repetir este año. Me cuesta ganar. Prefiero llegar solo», bromea.
Progresión
El ciclista alavés, de 24 años, dio un salto en su evolución en 2005. «El año pasado ya rompí el hielo y exploté. Espero confirmarlo», señala.Y nos resume las temporadas anteriores. «Los dos primeros años fueron de adaptación y el tercero me salió bastante bueno. El cuarto, en cambio, tuve un bache porque acabé los estudios estudió Mecanizado y tuve una infección bucal. Me salió un año un malo y el año pasado asomé».
Siempre ha defendido los colores del Caja Rural, primero a los órdenes de Oscar Guerrero y desde el año pasado a las de Eugenio Goikoetxea. «Me han tratado bien y me he encontrado siempre a gusto; no tengo por qué mirar otros equipos».