GASTEIZ

Nada más terminar el partido de Copa, el héroe de la noche desveló en los micrófonos de Radio Vitoria la existencia de una técnica para este tipo de jugadas, un truco que sólo desvelaría a Bonano en caso de tener que enfrentarse a una pena máxima decisiva. «Funciona muy bien, pero esto no quiere decir que cada vez vaya a parar dos penaltis. Parar un penalti es muy difícil y cuando tienes un secreto no es para andar diciéndoselo a la gente, si no no es una sorpresa», explicó.

Además, en los dos penaltis que detuvo a Moreno y Christian, Ardouin vio cierto miedo en los rivales a la hora de chutar. «Cuando le vi venir, sabía que no tenía muchas ganas de tirar el penalti y no sé cómo explicarlo, pero con mucha concentración y un poco de suerte, detuve el balón. El tenía mucha presión, si marcaba pasaban de ronda, para él era muy difícil y yo me aproveché de la situación».

Con todo esto, Ardouin vivía ayer uno de sus días más felices en el Alavés. «Lo importante es que pasamos a otra ronda y vamos a jugar contra un equipo de Primera».