OÑATI
El Foro Rural Mundial cerró ayer su tercer congreso en Arantzazu con una exigencia al mundo urbano a que cambie de actitud y desarrolle políticas a favor de las zonas rurales. Este congreso, que se inauguró el jueves, congrego durante tres días en Donostia y Arantzazu a 70 expertos de más de una veintena de países.
Ayer se hicieron públicas sus conclusiones, entre las que destaca el compromiso de «trabajar por un marco justo de relaciones comerciales y de políticas agrarias que ponga freno a las desigualdades».
Denunciar «los intereses económicos y comerciales que favorecen la apropiación de recursos por unos pocos, en detrimento de las condiciones de subsistencia de millones de campesinos, y del desarrollo sostenible», es otra de las conclusiones a las que llegó el Foro Rural Mundial, que preside Juan Luis Laskurain
Esta ONG apostó también por fortalecer las redes internacionales que fomenten el intercambio de experiencias y buenas prácticas en desarrollo rural, así como el aprovechamiento «de los canales que ofrece la empresa privada para buscar acciones conjuntas con organizaciones sociales que promuevan inversiones racionales y que no se limiten al mero beneficio económico».
Por último, también reclamaron a los gobiernos de los países desarrollados que «cumplan su palabra y alcancen sus compromisos de financiación a la cooperación al desarrollo», tras asegurar que «la meta del 0,7% se está quedando corta incluso antes de que sea alcanzada».