Askatasuna busca compromisos en la defensa de los derechos de los presos
Askatasuna dio inicio ayer en Arrasate a una nueva iniciativa, de carácter itinerante, que tiene por objetivo «dar a conocer la grave situación que sufren los presos políticos vascos» en las cárceles de los estados español y francés y recabar compromisos en defensa de los derechos de los prisioneros. La iniciativa gira sobre tres ejes: la excarcelación inmediata de quienes están enfermos, la de quienes han cumplido sus penas y la repatriación del Colectivo.
15 personas ayunarán una semana
La iniciativa emprendida en Arrasate estará caracterizada
por muy diversos actos: reuniones con agentes, comparecencias, charlas,
encarteladas... Además, 15 personas realizarán un ayuno que comenzó ayer y que
se prolongará hasta el próximo sábado. Haizpea Otxandiano, en nombre del
movimiento pro amnistía de Arrasate, destacó que «la defensa de los derechos de
los presos no puede estar en manos de unos pocos. Todos tenemos algo que decir,
y algo que hacer». Es por ello que incidirán en la búsqueda de compromisos para
dar «nuevos pasos» en demanda de respeto a los derechos de EPPK. Además, emplazó
a los vecinos de Debagoiena a participar en las concentraciones de último
viernes de mes y en la manifestación que se celebrará el día 28, a las 18.00,
desde el frontón Uarkape. -
ARRASATE Askatasuna llevó a cabo ayer en Arrasate una asamblea en la que realizó balance de la política penitenciaria que aplican los gobiernos español y francés al Colectivo de Presos Políticos Vascos «la valoración no puede ser más preocupante» y adoptó una decisión:dar comienzo a una iniciativa que pretende, al mismo tiempo, informar y buscar respaldo.Acompañado de decenas de familiares de los más de 130 presos que deberían estar en libertad bien por sufrir enfermedades graves e incurables, bien por haber cumplido la condena, Juan Mari Olano fue el encargado de explicar ante los periodistas tanto el balance como los pormenores de esa iniciativa, que comenzó ayer mismo en Arrasate y que, tras re- correr varias comarcas (Lea Artibai, Sakana, Debaldea, Durangaldea, Baiona y Baigorri), culminará en la semana del 9 al 16 de diciembre. Esos últimos días pasará por Iruñea, Donostia, Gasteiz y Bilbo. «Los estados utilizan la política penitenciaria para chantajear a todo un pueblo; no a la izquierda abertzale, sino a todo un pueblo. Y su objetivo es provocar sufrimiento», manifestó Olano, junto a quien se sentaron en la mesa Estanis Etxaburu, Agurtzane Alkalde (ambos de Etxerat), Joxepa Arregi (madre de Jesús Mari Zabarte), Santos Sagardui (padre de José Mari Sagardui, Gatza) y Haizpea Otxandiano (representante del movimiento pro amnistía de Arrasate). El portavoz de Askatasuna denunció que los gobiernos de París y Madrid «han llevado hasta el extremo la venganza, la conculcación de derechos y las condiciones de vida de los presos», al tiempo que consideró que con la llegada de José Luis Rodríguez Zapatero a La Moncloa la política carcelaria «se ha agravado».
La claridad de López Aguilar
Pero esa actitud, a su juicio, no se limita a las autoridades españolas:«El Estado francés también ha dado pasos similares en el mismo sentido. La dispersión es cada vez más extendida, existe una presión permanente e incluso personalizada respecto a los presos y se han instalado medidas de excepción». Sobre estas últimas, dijo agradecer aquellas manifestaciones, por ser «claras y públicas», del ministro de Justicia español, Juan Fernando López Aguilar, cuando declaró que «vamos a construir nuevas imputaciones» para evitar que los prisioneros que cumplan la condena no queden en libertad. «El ejemplo más evidente es el de De Juana, pero no el único. 135 vascos siguen presos pese a haber cumplido sus penas, y para ello han hecho uso de una treta legal. Y la lista es cada vez más larga», recordó. «Vamos a hacer todo cuanto está en nuestra mano para lograr la repatriación, con todos sus derechos intactos, y la inmediata vuelta a casa de los presos enfermos y de los que han cumplido la condena», explicó Juan Mari Olano, quien agregó que «cuando la mayoría de la ciudadanía vasca apuesta por la solución democrática, no es posible que jueguen políticamente con los presos. Hay que terminar con toda esta brutalidad e injusticia».
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