Eran las seis de la tarde, se cerraron los colegios electorales y un sofocante calor nos asfixiaba en un habitáculo de quince metros cuadrados del que no saldríamos hasta contabilizar el último voto. Tuvimos suerte y gracias al acuerdo y la buena voluntad sólo estuvi- mos cuatro horas. Los tres miembros de la mesa empezaban el, proceso de escrutinio ante la atenta mirada de los cinco fiscales del FSLN, ALN, PLC, MRS y AC, y los dos observadores, un joven nica y un servidor. Pasadas las diez de la noche se me hizo muy difícil contener la emoción al ver cómo el recuento concedía un 40% al Frente con una diferencia de diez puntos sobre el segundo. Ya en la calle, y después de felicitar a todos por la lección democrática, me dirigí hacia la pelota sandinista dándoles la enhorabuena por el triunfo que se empezaba a vislumbrar.

Va por ustedes. Tuvieron la noblesa de escribir lo que piensan, aunque desde el corasón no piensen lo que escriben. Está bueno. También disen que al nica no le gusta escribir y desde luego eso es sierto. Lo malo es que a los que les gusta escribir o, quisás, los que pueden escribir nos están en un caserío alejado de Managua y tampoco en el basurero de Managua. Los que escriben también tocan la guitarra, la marimba y entonan sus escritos. Sierto es que hay grandes músicos que no saben escribir, quisás por eso no sean conosidos. Pero lo más sierto es que el Frente tiene que escribir mucho más, ya que a esta vieja Europa sólo llegan las palabras escritas y el palpitar de la guerrillera se pierde en el océano. Va por ustedes, Josus, Sabinos y demás. También por ustedes y sobre todo por ustedes, muchas grasias a William, Orlando, Oscar...

Si al onse le quitás cuatro te vas a julio, y si al sinco le sumás catorce te ponés en diesinueve. Lo único malo es que ya hubo un diecinueve de julio y quizás el de ahorita no se viva como en el pasado, pero que se está viviendo y disfrutando es evidente, y yo no les voy a quitar el plaser. Disfruten, pues, hermanos nicaragüenses, que son de a verga.

El FSLN no es de Daniel, ni de Tomás, ni de Bayardo, ellos son del Frente. El Frente es del pueblo ­¡oh, qué bonito!­, sí, del pueblo que ha creído en sus líderes, que les ha dado confiansa, que les ha dado otra oportunidad, que quiere que el Frente gobierne. Un Frente mucho más grande que una cuadrilla de caudillos, que está omnipotente y no como Dios, es táctil, se ve, se toca, se palpa, se siente, se huele, y cuando huele mal huele peor, porque el nica huele mucho, huele al hediondo del chele, huele la comida que no le llega a la boca, huele la mierda que le rodea y el único que conseguirá que la nica huela mejor ­no menos­ será el Frente.

Quien alimenta al Frente es el pueblo. Sierto es que para alimentarlo hacen falta reales y que esos reales de algún sitio tenían que salir. Sierto es que todos los reales no se han utilizado para alimentar al Frente y menos al pueblo. Pero sierto es que muchos reales sí han llegado al pueblo, que las piñatas hasen felises a los chigüines y que la piñata hiso felis a muchos, pero más a algunos piñateros, pero el tiempo los colocó en su sitio y ésos ya no hasen felices a los chigüines. Yo me quedo con los piñateros que hasen felices a los chigüines, y esos piñateros están en el Frente. Ojalá haya piñatas para todos los chigüines, chigüinas y madres de Nicaragua.

No hay duda de que el Frente la cagó. El tema del aborto terapéutico es prueba de ello y espero que ninguna mujer tenga que recurrir a la percha. Sólo la caga quien la hase, quien está desde la barrera mirando normalmente está cagado y por desgrasia en eso que llaman isquierda hay mucha cagada, exportadores de revoluciones pero que no se arriesgan a cagarla en su tierra. No hay duda, el Frente la cagó y espero que vuelva a cagarla esta vez a favor de la mujer y de la niñez.

Nunca me confesé, alguna vez probé el cuerpo de Cristo y no fue por hambre, fue por plaser. Luego me di cuenta de que con el paladar pegado a la lengua no se podía ni respirar. Pero también me di cuenta de que en Nicaragua cuando te cagás en Dios la gente te mirá mal, y dejé de cagarme en Dios. Luego fui padrino eclesiástico delante de un padre español por el que no habría llorado si le hubiese dado un infarto, metimos a la contra en nuestro proyecto de lisiados de guerra, mi mujer miskita no fue de Yatama porque a su papá lo despedasaron meses antes del triunfo, grasias al capital pude ir al lugar más lindo del mundo, me como los mejores frijoles de las campeches pertenesientes al tsunami rojo y así, contra-disión más contra-disión, he intentado haserme nica. Perdónenme los revolucionarios por haber faltado a la ética occidental y haberme convertido en un indio mosonteño, pero merese la pena.

En Nicaragua hay mucho sapo, pero lo saben. En Occidente hay mucho sapo ­estético­ revolucionario, pero no lo saben. En nombre de la verdad juegan a ser dioses y jueses, pero no lo saben. Creen hacer favores a la sociedad y viven a cuenta de ella, pero no lo saben. Van al Terser Mundo de perdonavidas, viven a cuenta de la miseria de los pobres, imponen proyectos con sus placas amarillas de MI ­misión imposible­, en nombre de la sostenibilidad sólo se sostienen ellos, pero no lo saben. En Occidente hay mucho sapo al que sólo le salen sapos y culebras, pero no lo saben. Un amigo me dijo que la ignorancia es la madre del atrevimiento, y yo les digo bienaventurados los ignorantes, ya que siempre tendremos mucho que aprender y Nicaragua siempre será una buena escuela, pero no lo saben.

Qué fásil es hablar desde una mesa con mantel. Ante la injerencia capitalista e imperialista no hay otra, convensés a los nicas de que el nacionalismo y su unidad es la única solución o no hay nada que haser. Gente como Lula también ha sido crusificada, pero al final la unidad ha triunfado en Brasil. Yo no lo sabía, pero en Nicaragua no hay otra. Yo, sin duda alguna, prefiero un frente condisionado por la aliansa pero gobernando que a la oligarquía conservadora vendiendo el país a los vesinos del norte. De todas formas, no soy nadie para sacar la cara al Frente, por eso pido a esos fraternos sandinistas que expliquen bien a esta vieja Europa por qué el triunfo popular ha necesitado de esa convergensia y por qué toda esa gente capaz de dar la vida ­así son los plomos­ decide hacerse compañera de viaje de sus enemigos. Lo nesesitamos.

La S no es sólo un símbolo güegüense, es la S de Sandino, la S del sol de libertad y esta vez el amanecer dejó de ser una tentación. El día seis de noviembre todos amanecimos cansados pero felices, Managua hedía a pólvora sin muertos, los mariachis animaban la misa campesina, los indígenas bailaban palo de mayo, las rutas se abarataban, el tsunami rojo trabajaba la tierra con la urea sandinista y América entera latía de emoción. Sólo un tenebroso lugar no fue capaz de ver amanecer, allí amaneció cuatro días más tarde, ya que los sandinistas fueron capaces de llevar el sol hasta el catre del embajador gringo. Así son los nicas, si confían en vos te lo dan todo; como les falles también te lo dan todo, pero mejor que salgas corriendo. Yo no tengo más que agradecerles, a mí ya me han agradecido demasiado. Grasias. -