Tony Blair muestra su apoyo a Maliki en una visita sorpresa a Irak
BAGDAD
El primer ministro británico, Tony Blair, realizó ayer una visita por sorpresa a Bagdad durante la que se entrevistó con su homólogo iraquí, Nuri al Maliki, para expresarle su apoyo tras la toma de posesión de su incompleto Gobierno. Blair olvidó que la elecciones se celebraron bajo una ocupación militar, y dijo que con un «Gobierno legítimo en el poder, no existe excusa para los terroristas». En cuanto a la presencia de las tropas de ocupación, dijo que estas se irán cuando haya paz en el país. «Estos han sido tres años de lucha y queremos ver lo que quieren ver ustedes que es que los iraquíes tomen el mando de su propio destino y de su futuro», dijo en rueda de prensa al término de su encuentro con Al Maliki. Lejos de las moquetas de los salones de la Zona Verde, la violencia de la ocupación, de la que el propio Blair es responsable, se cobró ayer la vida de 22 personas, además de la de un invasor estadounidense. Asimismo, fuentes leales a Washington indicaron ayer que el domingo murieron al norte de Bagdad veinte miembros de la resistencia cuando pretendían asaltar una posición de las tropas locales. Entre las muertos de ayer figuran cinco policías, un coronel, dos directores generales de ministerio y un juez.
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