2006-06-03
Garoña no es limpia ni segura ni barata
El debate sobre la producción energética se reproduce continuamente, y lo hace con especial interés en los lugares afectados por la existencia de una infraestructura de tanta incidencia como tiene una central nuclear. Euskal Herria se encuentra dentro del radio de acción de la central de Garoña, lo que hace que los posicionamientos sociales, políticos e institucionales se hayan sucedido continuamente desde su construcción y puesta en funcionamiento. Ayer, sin ir más lejos, el Parlamento de Gasteiz aprobó una nueva moción instando al cierre de esta central y rechazando la posibilidad de una nueva prórroga de funcionamiento. De esta manera, la mayoría de fuerzas políticas de la CAV enmendaban la plana a las fuerzas políticas que en el Congreso español rechazaron, el pasado 26 de mayo, una moción en la que se instaba al cierre de Garoña y a continuar con el plan de clausura de las antiguas plantas nucleares, después de que el pasado mes de abril se cerrara la central de Zorita. Porque de hecho, tanto en el Congreso español como en el Parlamento de Gasteiz, PP y PSOE, por diferentes motivos, se están resistiendo a que se concrete, negro sobre blanco, el cierre de centrales tan caducas como Garoña, a abandonar la apuesta nuclear y a arbitrar una política de producción y consumo energético basada en el ahorro, la utilización racional de los recursos y la producción de energía a través de fuentes renovables.
>>>
Aurreko editorialak
2006-06-02
- La Sección 14 y la Audiencia Nacional
2006-06-01
- Las hipotecas cada vez pesan más
|