Las diputaciones de Bizkaia, Gipuzkoa y Araba estudian impugnar la Ley de Suelo
La previsible aprobación el 30 de junio de la Ley de Suelo ha provocado las reacciones de agentes e instituciones, entre ellas la de las diputaciones de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, que se están planteando impugnar la norma una vez sea aprobada por el Parlamento de Gasteiz. La mayoría de los partidos políticos apuntó a la «incoherencia» del PNV.
DONOSTIA
Las diputaciones de Bizkaia y Gipuzkoa barajan la posibilidad de impugnar la futura Ley de Suelo y en la de Araba se lo están planteando, alegando que ésta afectará directamente a sus competencias urbanísticas y podría suponer la modificación de la Ley de Territorios Históricos (LTH). El texto quedó pactado el pasado miércoles en el Parlamento de Gasteiz por el tripartido, PSOE y Aralar, y recibió también el apoyo de Eudel, por lo que se espera que en el Pleno del 30 de junio se le dé el aprobado definitivo. El diputado general de Gipuzkoa, Joxe Joan González de Txabarri, especificó que las diputaciones no decidirán nada hasta que el dictamen se publique en el BOPV.Ante la posibilidad de las impugnaciones, las reacciones no se hicieron esperar. La mayoría de los partidos políticos se refirieron a «la profunda división que existe en el seno del PNV», partido que el miércoles acordó la aprobación de la ley en el Parlamento y que, mediante su representación en las diputaciones, plantea ahora su paralización. Desde el PSOE, Rodolfo Ares exigió al PNV que «ponga orden en su casa» para que el anuncio de las diputaciones no se consolide. El alcalde de Donostia, Odón Elorza, apuntó que las entidades «se resisten a perder su poder por un problema de protagonismo y de celos respecto a los consistorios». Tanto Ares como Elorza se mostraron seguros de que la norma será aprobada el 30 de junio. La representante del PP en las Juntas Generales de Gipuzkoa, Regina Otaola, exigió al diputado de Ordenación y Promoción Territorial, Koldo Azkotia, que comparezca ante las Juntas para que clarifique cuál es su postura sobre esta ley, que «está siendo foco de polémica» y que es «respaldada por su propio partido en el Parlamento». EA definió de «contradictorio y paradójico» que «la iniciativa salga precisamente de uno de los partidos que ha impulsado el texto». En cuanto a la posible modificación de la LTH ley que establece el reparto de las funciones de las administraciones que auguran las diputaciones, EA consideró que «no será vulnerada». Explicó que «se les devuelve a los ayuntamientos una serie de competencias que en su día habían pasado a manos de las diputaciones». Por último, consideró que «quienes desde determinadas instancias lanzan este tipo de propuestas contra la Ley de Suelo, no hacen más que debilitar los efectos positivos que esta ley tendrá indudablemente en el mercado de la vivienda».
«Liberal, desregulada y flexible»
Eusebio Lasa y Joseba Permach presentaron la lectura de Batasuna sobre la previsible aprobación de la norma, que calificaron de «liberal, desregulada y totalmente flexible», y mediante la que «los alcaldes con intereses urbanísticos y económicos podrán campar a sus anchas». Consideraron que esta norma «vuelve a negar» la propiedad social del suelo, que «sigue siendo un elemento de negocio en manos de los que quieren seguir especulando para que la vivienda tenga en Euskal Herria los precios más altos del Estado español». Criticaron que la Ley de Suelo «no hace frente» a la vivienda de alquiler, y lamentaron que en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa existan 100.000 viviendas vacías: «Esos temas se dejan al margen, ni el señor Madrazo se cree que esta ley sirva para hacer frente con coherencia y dignidad al problema de la vivienda. Sus promesas se han quedado en agua de borrajas».
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