MADRID
La Audiencia Nacional ha impuesto al preso Unai Parot una condena añadida de once años de prisión por una carta escrita en el año 2001 y en la que el tribunal asegura que se intentaba «influir en las acciones de ETA, proponiéndoles un determinado modo de desarrollar su actividad, buscando objetivos más vitales contra el Estado».Pese a que Parot ya fue condenado en su día por «pertenencia» a la organización armada vasca, ahora se le vuel- ve a aplicar la misma tipificación delictiva argumentando que se ha vuelto a integrar en ETA, todo ello pese a encontrarse en prisión desde hace ya casi 17 años.
La sentencia admite incluso que este delito es considerado como «permanente», pero matiza que ello no implica que el detenido, juzgado y condenado por este tipo penal no pueda renudar luego su integración «de forma eficaz y ac- tiva». Así las cosas, el fallo argumenta que su pertenencia a ETA se interrumpe con la desarticulación de su comando en el año 1990, y que se reanuda ahora con esta carta.
«Caso De Juana»
El tribunal sentenciador introduce además la apostilla de que este hecho no tiene relación con la condena a Iñaki de Juana a doce años y siete meses por dos artículos publicados en GARA. En este caso no se aplicó el concepto de «pertenencia», pero sí el de «amenazas terroristas».«Entonces se trataba de cartas enviadas a un periódico y lo que aquí se enjuicia son también cartas, pero enviadas a la cúpula de la organización y dirigidas a fijar una línea más dura de actuación», dice la sentencia.
La Fiscalía había pedido una condena de 29 años (cuatro más que al inicio de la vista oral), argumentando que Unai Parot no sólo pertenece a ETA, sino que tiene grado de «dirigente».