Prieto (PSE) defiende que el proceso va «según las reglas y tiempos previstos»
El dirigente alavés del PSE Txarli Prieto trató ayer de restar importancia a las tensiones existentes en este momento del proceso indicando que no hay motivos de preocupación. «Las cosas van de acuerdo a las reglas y los tiempos previstos», señaló tras declaraciones como las de Pernando Barrena (Batasuna) o el obispo de Gasteiz, Miguel Asurmendi. Dijo que el alto el fuego, la «verificación» y el diálogo con ETA suponen «el norte que no hay que perder».
GASTEIZ
El secretario general del PSE en Araba, Txarli Prieto, que parece ejercer estos días de agosto de portavoz oficioso de su partido, aseguró ayer en una entrevista a Radio Euskadi que no hay motivos para preocupación, después de declaraciones como las realizadas en estos últimos días desde sectores tan dispares como la izquierda abertzale y el Obispado de Gasteiz. Según su tesis, «todo camina según lo previsto».Abogó por no prestar excesiva atención a las declaraciones de representantes políticos o a afirmaciones de medios de difusión que generan polémicas diarias: «Más allá de ello, lo sustantivo del asunto es que el proceso sigue marchando de acuerdo a las reglas que nos habíamos previsto, a los tiempos que nos habíamos previsto». Achacó la confusión al hecho de que «éste es un proceso que todos los días es radiado, televisado y escrito en los medios de comunicación». Frente a ello, defendió que lo importante es «no perder el norte» y saber que «el norte es el alto el fuego, la constatación de no existencia de actividades terroristas, el diálogo con ETA y, finalmente, una solución para que el terrorismo desaparezca».
Tres fases
En esta línea, Txarli Prieto recalcó que se han cumplido tres fases previstas por el PSOE. Recordó que en primer lugar la formación que lidera José Luis Rodríguez Zapatero insistió en reclamar un alto el fuego de ETA, decisión que tomó la organización armada vasca en marzo. Entonces, el Gobierno español impuso el llamado «proceso de verificación», al que decidió poner punto final en junio. Y en ese momento, Zapatero cumplió su palabra de anunciar en el Congreso su disposición a abrir un diálogo con ETA sobre cuyo desarrollo dará cuenta a los grupos del Congreso a fines de setiembre.En función del cumplimiento de estas fases, el dirigente alavés del PSE recalcó su impresión de que este proceso «va bien». El entrevistador le preguntó entonces por el otro compromiso expresado por Zapatero en su comparecencia de ju- nio en los pasillos del Congreso, el de respetar la decisión que adopte la ciudadanía vasca, y en este punto Prieto introdujo diversos matices. Así, lamentó que no se preste atención a la coletilla introducida por el presidente español en relación a la necesidad de «respeto a la legalidad», y consideró que no debe entenderse que el presidente español asume así el derecho a decidir de los vascos en los términos planteados por los abertzales.
Soledad del PP
Sobre las perspectivas postelectorales, Prieto negó rotundamente cualquier opción de pactos de gobierno con la izquierda abertzale:«Tiene un pasado suficientemente turbio como para que esté muchos años demostrando sus nuevas artes democráticas, si es que las posee».Trató además de distanciarse del PP, a quien el PSOE apoya tanto en la Diputación de Araba como el Ayuntamiento de Gasteiz. Le acusó de tener una posición «excluyente y radicalizada» y recordó que no sólo está lejos del PSOE, sino de antiguos socios como PNV o CiU.
«La mesa es algo que la izquierda abertzale necesita, no otros partidos»
GARA
GASTEIZ Aunque no cuestionó la formación de una mesa multipartita de diálogo, Prieto sí aprovechó la entrevista a Radio Euskadi para presentarla como una especie de concesión a la izquierda abertzale. Textualmente, el secretario general del PSE en Araba afirmó que «la mesa de partidos no es algo que necesitemos los partidos democráticos», sino que en todo caso «puede ser algo que necesite la izquierda abertzale para hacer el periodo de transición». En la línea de lo que están haciendo otros dirigentes de su partido tanto en Euskal Herria como a nivel estatal durante las últimas semanas, Txarli Prieto quiso así aumentar la presión sobre Batasuna para que «tome el camino de la legalización». En concreto, Prieto estimó que si la izquierda abertzale «no lo trabaja», una mesa multipartita «no tendría sentido» porque «los partidos democráticos ya tenemos un foro de debate, que es el Parlamento o que son las Juntas Generales y los ayuntamientos». Preguntado sobre su posición en el debate entre si deben conformarse una o varias mesas de diálogo multi- partito, el secretario general del PSE en Araba consideró que la discusión no tiene sentido ya que no cabe otra opción que hacer una para la CAV y otra para Navarra «si algún día alguien quiere hacer alguna mesa ahí». Recurrió incluso al absurdo para añadir que «ni en la Comunidad Valenciana se podrá hacer una mesa que implique al País Vasco, ni en el País Vasco una que implique a Navarra». «El problema de fondo» Txarli Prieto ligó con todo esto la manifestación convocada el domingo en Donostia, que presentó como «acto de fuerza o pulso» por parte de Batasuna. «El problema de fondo no es esta manifestación, sino es que Batasuna sigue alargando las obligaciones que tiene con la democracia, que es participar y facilitar su legalización», indicó. «Puede decir lo que quiera, puede incluso hacer misa cantada, pero sabe perfectamente que si quiere participar en la vida democrática se tendrá que homologar con las reglas», apostilló.
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