La cuenta atr�s empieza en el 51 y se detiene moment�neamente en el 22. Moment�neamente. Jacques Chirac, curtido en mil intrigas, dejar� que pasen las protestas del viernes 22, del s�bado 23 y del domingo 24, sabedor de que el conteo proseguir� su regresi�n hasta alcanzar el tres, dos, uno, cero, o sea, la culminaci�n del proyecto M51, el nuevo misil de 10.000 kil�metros de alcance y unos cuantos kilotones de potencia destructiva. Los ecologistas y pacifistas que se van a congregar desde este viernes hasta el domingo en Biscarosse, frente al centro de ensayos donde se prepara este supositorio nuclear, saben tambi�n que la Rep�blica no detendr� su cuenta atr�s as� como as�, pero van a intentar retratarla.

Porque la Rep�blica de la fraternidad ha apostado un past�n por el rearme nuclear, que aunque estos cohetes millonarios no son para dispararlos en la noche del 14 de julio sobre el cielo de Par�s ni para repartir cruasanes en Beyrut, no est�n concebidos para el mal. Al contrario, s�lo surcar�n las nubes en caso de que peligre la paz de la humanidad.

El M51 es el lodazal resultante de la polvareda que levantaron estas reflexiones hace poquitos a�os, cuando despu�s del 11 �se, el salvapatrias de Chirac declaraba solemnemente que ante tanta amenaza terrorista la �nica soluci�n es la prevenci�n, y si es at�mica mejor, que un gran Estado democr�tico como Francia no puede quedarse de brazos cruzados frente al eje del mal.

Y de no querer quedarse con los brazos cruzados, la Francia del neogaullismo ha pasado a cruzarle un corte de mangas al Tratado de no Proliferaci�n Nuclear. Para que luego vaya Chirac a Ir�n a darle lecciones de �tica at�mica a Ahmadineyad. Y lo peor es que el muy sinverg�enza dice que no es para tanto, que los nuevos misiles tienen una peque��sima cabeza nuclear, una nimiedad oiga, para que se haga una idea, menos potencia at�mica que la de la bomba de Hiroshima, y qu� es eso, pues poquita cosa, que total, con lo que ya hay circulando por ah� esto es un arma nuclear liliputiense...

Espero que la cuenta atr�s de este personaje est� acerc�ndose al cero. A ver si este fin de semana, en las �inspecciones ciudadanas� de Biscarosse ­a menos de 150 kil�metros de Baiona­, alguien calibra mal un misil para que caiga en los El�seos y aceleramos el conteo. Y si le pillan a Sarkozy visitando al presi, bonus track y a por la Casa Blanca. Qu� b�lico le vuelven a uno. -