DONOSTIA
Uno de los problemas principales que encuentra la Real en ataque es la falta de profundidad por las dos bandas. Si ante el Sevilla entre Gari y Xabi Prieto sólo fueron capaces de enviar un centro al área de Palop, en el Bernabéu se repitió la historia y ese es un problema importante para un equipo que tiene un delantero como Kovacevic que necesita balones laterales para imponer su envergadura y dominio del juego aéreo. Cuando un equipo falla en ataque se mira al delantero como el año pasado se culpaba a los centrales de la cantidad de goles encajados. Pero lo cierto es que el único balón que ha podido rematar el serbio en los dos últimos partidos es el que le regaló Javi Navarro. Ninguno de los que han enviado sus compañeros los ha podido recibir en unas mínimas condiciones para poder optar al remate.
No hay muchos equipos que tengan interiores con profundidad por banda izquierda. El Madrid es un ejemplo, pero ante la Real cargó el juego por la derecha con Reyes y Cicinho en constante actividad ofensiva.
Por la derecha
Por eso, salvo que Fabio Felicio tenga continuidad y confirme los detalles que muestra en sus minutos, lo más importante es hacer de la banda derecha una buena baza ofensiva con Xabi Prieto y Aitor. Hasta que el serbio y Aranburu alcancen un mejor nivel, el donostiarra es la principal baza ofensiva y no puede ser que juegue noventa minutos y no haga ninguna jugada de peligro ni envíe un centro al área. Y tampoco la responsabilidad de que eso suceda es sólo suya. Todo el equipo debe saber cuales son sus mejores bazas y explotarlas.
En los dos últimos partidos ante Sevilla y Real Madrid, Jesús Navas y Reyes eran buscados sistemáticamente por sus compañeros para que desbordaran y además contaban con el apoyo de sus laterales para crear situaciones de superioridad. Entre Navas y Reyes enviaron diecinueve centros al área de Riesgo y tres disparos desde la derecha por un sólo centro y ningún remate del realista con más calidad.El balón no llega a la banda en condiciones porque tampoco en el centro se combina lo suficiente y se dan buenas aperturas. Apenas se envían balones al área rival desde los últimos veinte metros y en esa faceta el aspecto más positivo es la aportación de Fabio Felicio. Ante el Madrid jugó veinte minutos y fabricó el doble de jugadas que Prieto y Gari juntos y puede ser una alternativa para buscar profundidad por la izquierda.
Buenos defensores
Gari es un buen jugador en defensa, pierde pocos balones y provoca faltas, pero no puede desbordar en la izquierda porque le faltan recursos para el regate y es difícil buscar centros para un diestro, aunque puede jugar perfectamente ahí si desde la derecha y el centro se genera más peligro. Porque si juegan Gerardo y Rivas en el doble pivote es difícil elaborar juego. Y es que la Real ahora tiene demasiados buenos defensores en el centro del campo y pocos jugadores capaces de elaborar jugadas de ataque.
Por eso el juego es demasiado directo, los balones se envían al área sin elaborarlos desde muy lejos y eso facilita el trabajo de los defensas, en clara ventaja sobre el delantero en ese tipo de balones y la posesión la acapara el rival. De los cinco remates realistas del Bernabéu, todos ellos sin peligro, el único que no fue a balón parado llegó en un saque rápido de Riesgo que tocó Prieto y Díaz de Zerio remató desde muy lejos sin ángulo a la portería de Casillas. Los otros cuatro llegaron a balón parado en dos lanzamientos directos de Gari y Gerardo y dos cabezazos de Díaz de Zerio y Labaka.El Real Madrid envió 41 balones al área, la mayoría en el segundo tiempo, y sólo cuatro de sus doce remates llegaron en jugadas a balón parado. Cierto es que en todo el primer tiempo el Madrid sólo tuvo la ocasión de Van Nistelrooy, pero cuando se juega tan poco en ataque, se le da tanta posesión al rival y se le permite enviar tantos balones al área, es casi imposible mantener la portería a cero.
Kovacevic: "No voy a crear
problemas"
Darko Kovacevic asumió con profesionalidad la decisión de Bakero de dejarle en el banquillo: «Siempre tengo ganas de jugar como todos y peleo para hacerlo, pero no me voy a alarmar ni crear problemas porque por encima de un jugador es importante el equipo. El viernes y el sábado hablé con el entrenador y me comentó que tenía algunas ideas para jugar contra el Real Madrid aunque todavía no tenía el once perfilado. Yo le dije que por la Real, lo que fuera». El serbio manifestó «me voy a enfadar para trabajar y volver al once cuanto antes. Ver el partido desde el banco es diferente y más duro que estar sobre el campo. Si se le pregunta a cualquier jugador si le gustaría jugar contra el Real Madrid, va a decir que sí. La estadística dice que se me da bien, pero es lo que hay. Todos peleamos por jugar, en la plantilla somos 24 jugadores y aquí todos somos profesionales».
Preguntado por los problemas del equipo en los últimos partidos, principalmente en ataque, señaló que «tenemos que estar más arriba. Este año parecemos más equipo y estamos más organizados, pero necesitamos más pegada para machacar los partidos y tenemos que ganarlos. Y para eso hay que crear ocasiones y meter goles. Tenemos jugadores para hacerlo».
Espera que el primer triunfo llegue el domingo a las ocho contra el Recreativo: «Tenemos claro que hay que ir a ganarlo porque, si no, esos puntos que dejas escapar luego son muy difíciles de sumar».
Sin alegaciones a la expulsión de
Aranburu
Muñiz Fernández escribió en el acta que Aranburu «fue expulsado por derribar a un contrario por detrás estando el balón en juego sin opción de jugarlo» y ante esta exposición la Real entiende que no hay opción de dejar esa acción sin castigo de un partido y no presentará alegaciones. El jugador admitió su error, pero dejó claro que «fui al suelo con la intención de jugar el balón por un costado, no por detrás, para quitarle el balón, no fue ninguna agresión».
Skoubo trabajó por vez primera con el grupo
La Real se entrenó ayer en Zubieta nada más regresar de Madrid en una sesión en la que Skoubo trabajó por vez primera con el grupo. Hoy habrá jornada de descanso y mañana se volverá al trabajo con sesión doble.
